Cada vez es más habitual realizar distintas ceremonias y
rituales durante la celebración del matrimonio. Estas ceremonias enriquecen y
personalizan la boda, llenándolas de significado y emotividad.
Son muy frecuentes en las bodas civiles o simbólicas y, algo menos, en las religiosas. En las primeras, las ceremonias con cierto poder simbólico son casi obligadas, para darles un significado más profundo y espiritual. Es una forma de transformar un acto contractual en una manifestación pública de amor y de compromiso. En las segundas la cosa cambia: hay que contar con el beneplácito del párroco que celebrará la ceremonia (algo complicado a veces, porque lo consideran pagano), además de que el propio ritual católico está lleno de símbolos y de momentos con un significado muy intenso, por lo que tampoco se echa en falta más ceremonial.
Dentro de estas ceremonias que suelen simbolizar el amor, el
compromiso y la unidad de la pareja y su intención de formar una nueva familia
podemos encontrar las más habituales: la ceremonia de las manos, la de la rosa,
la de la arena o la de la vela.
En este post nos vamos a centrar en esta última: la Ceremonia
de la Vela. También se la conoce por la Ceremonia de la Luz, la Ceremonia de la
Unidad o la Ceremonia de la Vela de la Boda.
En esta primera parte os comentaré cuál es su origen, su significado, cuándo incluirla en la boda y en qué consiste el ritual. En la segunda os contaré cómo elegir las velas, el significado de sus colores, los textos que se pueden elegir y algunos consejos plus.
Comenzamos...
En esta primera parte os comentaré cuál es su origen, su significado, cuándo incluirla en la boda y en qué consiste el ritual. En la segunda os contaré cómo elegir las velas, el significado de sus colores, los textos que se pueden elegir y algunos consejos plus.
Comenzamos...
Como cualquier rito, necesita un medio físico en el que
manifestarse y, en este caso, se trata de una vela. Bueno, realmente, se
utilizan tres. Dos velas más pequeñas, que representan a cada uno de los novios
y una más grande, que simboliza la unión de la pareja, su matrimonio.
Su origen
Aunque su origen no está claro, parece que puede tener que ver con los ritos wiccanos o de culto a zoroastro. Incluso hay quien lo relaciona con las ceremonias new age. La lógica nos lleva a pensar que este tipo de rituales resultan de la mezcla de costumbres ancestrales y tradiciones familiares más modernas que buscan darle un significado más actual y personal a las ceremonias de boda.
Por ello es necesario que no toméis este tipo de ceremonias como algo estandarizado e inamovible, siempre lo podéis adaptar y personalizar según vuestro criterio y vuestra forma de sentir... o seguirlo al pie de la letra, como vosotros decidáis. El simbolismo se lo dais vosotros al ritual, no al contrario, tenedlo siempre presente.
Significado
El uso las vela en
cualquier ritual está relacionado con el significado de su llama: luz,
calidez, comienzo, celebración, protección frente a lo negativo, vida, pasión...
Las velas se utilizan con este significado en las celebraciones y ritos más
diversos: bautizos y otras ceremonias religiosas, cumpleaños, etc. Por este
motivo, era casi imprescindible incluirlas en las bodas.
El simbolismo de esta ceremonia es el de la unión de dos
individualidades (las velas pequeñas) que aúnan sus llamas para encender otra
mayor, la de la vida en común y aquello que van a compartir.
Cuándo...
Esta ceremonia se puede celebrar, tanto en las ceremonias religiosas como civiles, tras el consentimiento de
los contrayentes o después del intercambio de anillos. Esos dos momentos de la boda son perfectos, puesto que la Ceremonia de la Vela corona los dos momentos más importantes de su desarrollo, sin quitarles ni un ápice de protagonismo.
En cualquier caso, es necesario contar con el consentimiento
del oficiante (juez, concejal, alcalde…) o del sacerdote que vaya a oficiar la
ceremonia y, en caso de que lo autorice, habrá que coordinar con él/ella cómo y
cuándo se llevará a cabo el ritual.
Si se trata de una ceremonia simbólica o de una ceremonia
civil sin valor legal, podéis incluirlo en el punto de la celebración que más
os agrade, puesto que vosotros sois quiénes diseñáis su guión.
El ritual
El ritual siempre parte del encendido de cada una de las
velas pequeñas que representan a los novios. En algunos casos las prenden los
mismos novios según llegan a la ceremonia, en otros las encienden cuando comienza el
ritual y, en otros, son los padrinos los que encienden las velas y se las
entregan a los contrayentes cuando comienza el rito. Todo dependerá del
significado que le queráis dar a la ceremonia y de si consideráis oportuna la
participación de los padrinos o no. Si para vosotros la familia es muy importante, ni lo dudéis, dadles protagonismo a los padrinos; y si hay más miembros de familia o amigos que queráis que participen, siempre podéis añadir más velas con las que ellos puedan contribuir a la vela de vuestra vida en común. Es vuestra elección.
Después, el oficiante presentará la ceremonia, explicándola
brevemente a los asistentes y, posteriormente la dirigirá.
Ceremonia de la vela con Veladora del Amor |
Cuando la ceremonia ha finalizado, podéis hacer dos cosas:
dejar encendidas las tres velas o apagar las dos pequeñas. En el primer caso,
es una forma de expresar que, aunque sois una pareja, no renunciaréis a vuestra
individualidad. En el segundo caso, expresaréis que, a partir de ese momento,
renunciáis a vuestro pasado para ser solamente un presente: vuestro matrimonio.
Hay parejas que guardan la vela de su boda y la encienden en
momentos especiales (tanto tristes como alegres) o cuando necesitan renovar su
amor y su sentido de matrimonio.
Y hasta aquí esta primera parte del artículo. Nos vemos en la segunda...
Y hasta aquí esta primera parte del artículo. Nos vemos en la segunda...