¿Quieres que el Vestido Te Siente Como un Guante?

En esta época es muy frecuente ver a novias que siguen dietas absolutamente suicidas con el único fin de que el traje de novia les quede como un guante. Y ya he visto casi de todo: dietas de libro, vivir a base de manzana y agua varios días, no comer más que piña durante una semana, la dieta del conguito (o la del sugus) y otras locuras de lo más variado.  


Quizás ese tipo de insensateces consigan que los botones del traje de novia cierren sin estallar pero, además de no ser saludables, dejan el cuerpo blandito y sin tono muscular. Si se lleva un vestido sin mangas, los brazos acabarán como alas de murciélago (sí, sí, esos trocitos de piel que cuelgan y aletean cuando se saluda). Si se viste un bonito palabra de honor, esos rollitos tan impertinentes se escaparán por donde menos se les espera. O, si el corte es tipo sirena, ni la ropa interior más moldeadora conseguirá que no se noten las carnes blanditas que insisten en aparecer en los lugares más inoportunos. Y eso, con casi toda seguridad, no era lo que buscaban esas novias cuando comenzaron a torturarse con esas dietas. Esto sucede porque con estas dietas se pierde mucha agua y masa muscular rápidamente, con lo que el músculo y la piel se quedan flácidos.

 
Evidentemente, una alimentación saludable es imprescindible para perder peso. Y, como la mujer del César, no sólo debe parecer sana, también tiene que serlo. Una dieta desequilibrada puede tener muchas consecuencias negativas no sólo a corto plazo, también puede acarrear graves problemas de salud más adelante.

 
Y si vamos a lo que nos ocupa, el vestido de novia, no sólo hará falta una dieta, algo imprescindible será el ejercicio físico. Éste será el encargado de potenciar el efecto de la dieta y de moldear nuestro cuerpo. Una dieta por sí sola no sirve para tener el cuerpo tonificado y bonito; estará más sano, mejor nutrido y más delgado, eso sí, no te asegurará un body de pibón.

 
Pero, ojo, no sirve cualquier tipo de ejercicio físico o de deporte. Será necesario buscar un entrenamiento personalizado que cubra todas nuestras necesidades. Vamos, que ir a una clase colectiva de zumba está muy bien, pero no va a ser responsable de que el vestido blanco te quede como un guante. Necesitarás algo más... mucho más.


Y, como siempre, en este caso te hablo de la experiencia personal. Desde que estoy recibiendo entrenamientos personales, he notado cambios importantes en mi cuerpo: ha mejorado (mucho) mi tono muscular, tengo más fuerza y más energía, mi celulitis ha disminuido, mi postura corporal es mucho más adecuada, estoy perdiendo peso (sin hacer dieta alguna)... Eso sí, con esfuerzo y disciplina, porque el trabajo es duro. Incluso haciendo varias actividades colectivas (Bodycombat, Bodypump, spinning, boxeo...), siempre notaba que el trabajo no me daba los frutos que buscaba. Y ahora sí, a pesar de entrenar sólo una vez por semana.

 
Estoy convencida de que los entrenamientos personales son la mejor opción para cualquier novia, porque serán los que, en poco tiempo (y con esfuerzo) conseguirán que su cuerpo cambie. 


Algunas de las mejoras físicas que notarás:

¿Quieres ser una novia "fuerte"?

• Incremento del tono muscular. Así no te sentirás blandita y tu cuerpo se verá mucho más armonioso.

• Fuerza. Te notarás mucho más fuerte y resistirás mucho mejor el estrés y el trabajo de organizar la boda. Y estar más fuerte es algo que agradecerás también después, en tu vida cotidiana.

• Mejora en articulaciones y tendones. De esta forma evitarás las molestias y lesiones innecesarias.

• Coordinación. No sólo te servirá para moverte de forma más elegante y precisa, además te ayudará con el baile nupcial ;)

• Equilibrio. Algo imprescindible para moverse por el mundo... especialmente si el día de la boda vas a llevar unos stilettos.

• Agilidad. Así evitarás sentirte y moverte como una anciana.

• Flexibilidad. ¿Quién no quiere ser flexible? Es una forma de verse y mantenerse más joven y dinámica. Y tu chico también lo apreciará...

• Elasticidad. Imprescindible para evitar lesiones. Imagínate lo que es un lumbago el día de la boda.

• Mejora de la postura corporal. Para llevar un vestido de novia con dignidad es importante tener una postura correcta. Parecerás más alta y esbelta. Y en las fotos saldrás mucho más guapa.

• Pérdida de peso. En cada entrenamiento quemarás muchas calorías, lo que redundará en pérdida de peso, siempre que vigiles la alimentación. Pero, ojo, al principio puede que notes que no pierdes o incluso que ganas peso, pero eso es debido a que tu grasa se está convirtiendo en músculo, que pesa más. Mi consejo es que, al principio, te guíes por el metro, no por la báscula.

 
Y algunas otras ventajas de los entrenamientos personales que te interesarán:

• Personalización de los ejercicios. El entrenador te personalizará tu rutina en cada sesión para que vayas logrando tus objetivos. Tendrá en cuenta tus necesidades, tus capacidades y tu personalidad.

• Motivación. Entrenar de esta forma motiva mucho más que en el caso de las clases colectivas o de los entrenamientos por libre en la sala de cardio o de musculación. El entrenador te presionará más de lo que harás tú misma, seguro.

• Eficiencia y eficacia. Sacarás mucho más rendimiento a tu tiempo de entrenamiento, porque sólo te dedicarás sólo (en cuerpo y alma) a los ejercicios que te llevarán a alcanzar tu meta. No perderás tu tiempo, tu dinero... y tu paciencia. No habrá espacio para tiempos muertos o para charlar con los compañeros.

• Mejora de la técnica. El entrenador te guiará para que los movimientos sean eficientes y precisos, evitando cualquier tipo de lesión o de efecto indeseado. Y eso luego te servirá cuando hagas tus clases colectivas o tus propios entrenamientos, porque te dará una base estupenda.

• Se evita el estancamiento. Si siempre haces el mismo tipo de actividad, con el mismo peso y durante el mismo tiempo, habrás notado que te estancas, que no vas más allá. Con los entrenamientos personales esto no ocurre, porque cada día es distinto y te van a exigir un poquito más.

• Los entrenamientos son más creativos. Son mucho más divertidos que una sesión en la sala de musculación, tienen mucho de lúdico y así evitarás aburrirte. El aburrimiento es el mayor enemigo para el ejercicio físico. Bueno, y la pereza, no nos vamos a engañar.

• Aumenta el compromiso. Saber que tienes una sesión por una persona y a una hora determinada, incrementará tu grado de compromiso con el entrenamiento. Es como ir a hacer running con una amiga, pero que te va a machacar mucho más :)

• Mejora la capacidad de disciplina. El ejercicio físico exigente, sin darte cuenta, mejora tu disciplina. Y eso te lo vas a llevar fuera del gimnasio. Te ayudará a controlar mejor tus impulsos, a seguir una dieta, a dejar un mal hábito, a realizar esas tareas que no te gustan demasiado...

• Se descubre la capacidad de superación. Enseguida te darás cuenta de que no puedo, no existe, porque siempre puedes un poco más. Eso aumentará tu autoestima de manera notable, palabra.

• Se refuerza el trabajo que se hace fuera de los entrenamientos. Si después de la boda decides dejar los entrenamientos, cuando hagas ejercicio tú sola, te darás cuenta de que puedes poner en práctica todo lo aprendido, mejorando tu rendimiento aunque trabajes de forma individual.

Qué necesitarás:

• Un buen entrenador (es necesario que busques un buen profesional, lo que no quiere decir que sea el más caro. Averigua su formación y referencias antes de contratrar).
• Un buen gimnasio (no tiene porqué ser un centro elitista, debe estar bien equipado, ser cómodo y estar limpio).
• Ropa cómoda (no es necesario que seas la más cool, sólo hace falta que la ropa transpire y te permita moverte, porque te vas a mover... y mucho).
• Zapatillas adecuadas (muy importante).
• Unos guantes (salvo que quieras unos feos callos en tus manos para el día de la boda).
• Una toalla (tanto para secarte el sudor como para poner en esterillas y aparatos).
• Agua (necesitarás hidratarte, porque vas a sudar, my friend). 
• Haber desayunado o comido bien (y haber dejado pasar un tiempo prudencial entre la ingesta y el entrenamiento).
• Dósis extra de Esfuercil 500 mg. y de Disciplinina forte :)

Mi consejo es que, si quieres que tu vestido y tu cuerpo te sienten de maravilla, te apuntes a los entrenamientos personales. No necesitarás mucho tiempo y los resultados son increíbles. Y si lo que te preocupa es el dinero, te costará mucho menos de lo que te imaginas.


Aunque puedes encontrar gimnasios y entrenadores excelentes, no puedo dejar de recomendarte los míos: BodyFactory FitPrice de Plaza España (Madrid) y mi súper entrenador: Abelardo. Ahora han sacado una promoción especial para novias (y también para parejas) que está muy bien.

¡Venga, que todavía tienes tiempo de ponerte a punto!



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