Boutonniere Rústico DiY. Con Aroma a Lavanda

Hace tiempo escribí un post donde te daba las claves para hacer un boutonniere rústico hecho a base de espigas. Pero, como me gustan tanto las flores secas y el estilo campestre y desenfadado, no he podido resistir la tentación de presentarte otra versión. Esta vez con un tipo de flor que no sólo es preciosa, sino que también tiene un aroma increíble y evocador: la lavanda.

 
Es, como todos los DiY que te doy en este blog, fácil de hacer y con un resultado encantador.


Aquí vamos con el tutorial...


Materiales

• Tejido de yute en tono natural (lo puedes encontrar en tiendas de tejidos y manualidades).

• Flores secas de lavanda natural (así el novio llevará todo el día un perfume suave y agradable).

• Hojas de tela.

• Botones (yo les he utilizado con acabado de nácar y con un toque rústico, acorde al estilo del boutonniere).

• Alambre fino.

• Cinta decorativa (también la he elegido con un acabado rústico y en tonos neutros).

• Pistola de silicona caliente (no podía faltar).

Cómo hacerlo


Paso 1.  Marca las medidas que desees. En este caso, he cortado un cuadrado de 10 x 10 cm.

 

Paso 2. Corta la pieza con cuidado.

Paso 3. Deshilacha los bordes del tejido, para que el acabado sea más rústico. Además, así conseguirás que se deshilache por dónde tú quieres, no por donde quiera el yute.

Paso 4. Presenta las hojas y las flores sobre el cuadrado de la forma que más te guste. Aquí verás que he elegido hacerlo en forma de cucurucho.

Paso 5. Presenta también el cierre, para ver cómo quedará con el acabado que quieras darle. Así te harás una idea exacta de dónde quedarán mejor las flores. 
 
 

Paso 6. Pega las hojas y las flores al yute con la pistola de silicona caliente, en el lugar elegido. Ojito, que la silicona se acaba saliendo por los bordes y quema un poco. Hazlo con cuidado. 

Paso 7. Si ves que también debes asegurar las flores por la parte superior, para que no se muevan, ponle un poco más de silicona entre las flores.

Paso 8.  Pega los extremos del cucurucho de yute, tal y como quieres que queden. En este caso he preferido que queden con unas solapas, que le dan algo más de movimiento.

 

Paso 9. Asegura bien las solapas, para que no se muevan con un poco de silicona.

Paso 10. Ata el cucurucho con un poco de alambre fino, para que quede mejor sujeto y para darle forma.

Paso 11. Ata la cinta decorativa sobre el alambre con varias vueltas, terminando con un nudo. Como a los chicos les gustan tan poco los lazos, he preferido utilizar un simple nudo como final, más masculino.

 

 

Paso 12. Presenta los botones en el lugar que más te guste. 

 
Paso 13. Pega los botones con silicona caliente. Procura extender el pegamento por la circunferencia, evitando los orificios, así no te quemarás y no saldrán feos pegotes de pegamento por ellos.

Paso 14. Pégalos con cuidado, presionándolos hasta que la silicona se haya quedado fría. Si no te gusta el resultado, despega los botones (eliminando los restos de silicona) y vuelve a adherirlos.

El resultado


¿Qué te parece cómo queda terminado este boutonniere rústico y con un agradable olor a lavanda?

Recuerda que los boutonniere se colocan normalmente con alfileres de novia, porque es más fácil adaptarlo a la solapa, evitando que se descuelgue o que forme arrugas. Pero también puedes optar por pegar un broche en la parte trasera, de los que puedes encontrar en tiendas de artículos de bisutería.




Post relacionados:

Boutonniere Rústico DiY. Sencillo y Original
Consejos para Elegir y Llevar el Boutonniere (I)
Consejos para Elegir y Llevar el Boutonniere (II)
Boutonniere DiY: Económico y Sencillo de Hacer (I)
Boutonniere DiY: Económico y Sencillo de Hacer (II)
DiY: Cómo Hacer un Ramo de Espigas

Boutonniere Rústico DiY. Con Aroma a Lavanda by http://quiendijoboda.blogspot.com.es/2015/04/boutonniere-rustico-diy-con-aroma-a-lavanda.html is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 4.0 Internacional License.

Pon un Corner en Tu Boda

Seguro que has oído hablar de los corners en las bodas. Son esos pequeños rincones en los que se colocan alimentos o bebidas que tienen un cierta similitud y que se sirven aparte del menú principal de la boda. También se les denomina bodegones, puestos de comida, estaciones... 


Estos corner pueden ofrecer la comida preparada con antelación o preparada en vivo: cortadores de jamón, cocineros de sushi, etc.


Ahora no hay boda que se precie que no incluya alguno dentro de la recepción. Da igual que se trate de una comida o cena con los invitados sentados, un cóctel o un mix de ambos, no puede faltar un corner... o varios. 

Personalmente me encantan, porque dan mucho juego a la hora de organizar la boda. Aunque se pueden emplear para otro tipo de elementos que no sean alimentos o bebidas (abanicos, pashminas, bailarinas, gafas de sol, sombreros, bengalas, tabaco o o sólo con una finalidad decorativa), en este post sólo me voy a referir a ellos como parte del banquete. 


Te cuento más...


Ventajas

• Complementan el menú de un cóctel o una comida o cena con los invitados sentados. Pueden incorporar esos alimentos que no nos apetece que entren dentro del menú oficial, pero que sí queremos que estén presentes de algún modo en la boda. Por ejemplo: en un menú de cóctel, puede que no nos apetezca que pasen bandejas estándar con jamón, pero sí queremos que haya una estación con un cortador de jamón o un bodegón con ibéricos. También puede suceder que el menú que nos ofrece nuestro proveedor de catering se nos quede algo corto en cuanto a cantidad o variedad y queramos añadirle algunos platos más.

• Son divertidos. A la mayoría nos encantan los puestos de comida, porque nos permiten la posibilidad de servirnos nosotros mismos y de elegir otras cosas que no son un menú impuesto. Y nos enamora la variedad.

• Llaman la atención. Si están bien presentados e integrados en la decoración de la boda, son puntos que centran la atención de los invitados, algo imprescindible si queremos evitar un evento plano y aburrido.

• Permiten que los invitados puedan circular libremente y que se sientan más cómodos y relajados. Con las estaciones de comida y bebida puedes lograr un evento elegante, pero sorprendente y dinámico a la vez.

• Son decorativos. Su montaje puede formar parte de la propia decoración de la boda, lo que nos permite ahorrarnos otros puntos de atención.

• Tienen personalidad. Tanta como la de los propios novios. Lo ideal es que los corners se elijan y se presenten de tal forma que reflejen la forma de ser y gustos de la pareja.

A tener en cuenta...

Los corner complementan el menú: sentados o en cóctel

• Es necesario diseñar los corner para que complementen el menú principal. Es decir, es importante no repetir alimentos o bebidas en el menú principal y en los puestos de comida. Y deben tener coherencia en cuanto a sabores, aromas y presentación.

• La estética debe ser muy cuidada e integrarla totalmente en el ambiente y decoración de la boda. No hay ningún problema en que el corner sea rompedor, pero debe tener cierta coherencia con el resto de la boda. Me explico: si la cena es clásica, gourmet y lujosa, un bodegón con hamburguesas económicas de una multinacional norteamericana... quizás no sea la mejor combinación. Eso no quiere decir que no puedas servir este plato a tus invitados, sólo implica una cierta calidad y cuidado en su presentación. Quizás unas hamburguesas de calidad servidas en un bonito foodtruck vintage.

• La comida debe estar dispuesta de tal forma que el acceso sea cómodo. Es fundamental cuidar la presentación, pero ésta nunca debe estar por delante de la accesibilidad de los invitados a los alimentos y bebidas. 

 

• Es muy importante que si la comida o bebida se va a consumir cerca de propio puesto, se dispongan mesas o espacios donde los invitados puedan dejar platos, vasos o cubiertos ya usados. Es de lo más incómodo (y poco higiénico) encontrarse con platos o vasos entre las bandejas o el menaje sin usar. 

Siempre con material auxiliar suficiente

• Es imprescindible que los invitados puedan circular libremente entre los distintos puestos de comida, para evitar aglomeraciones. Eso implica una buena colocación dentro del espacio de la celebración, procurando que no estén muy cerca unos de otros o de las propias mesas de los invitados. 

• Debe haber material auxiliar suficiente para que los invitados no echen en falta ningún elemento necesario para sservirse o consumir la comida: cubiertos para servir, servilletas, platos, cuencos...

• Las materias primas deben ser de calidad. Y esto es importantísimo. Si no vas a poder ofrecer calidad, es mejor renunciar a estos complementos, porque se nota muchísimo. Además, las expectativas de los invitados ante un bodegón son mayores que con un menú estándar. Piensa que todo lo que se salga de la norma, lo sorprendente, pone un listón mental muy alto en cualquiera de nosotros.

• Los alimentos deben estar señalados convenientemente, para que los invitados sepan en todo momento qué van a comer. Si hay muchos platos diferentes en el corner o si son muy exóticos, los comensales agradecerán saber qué es cada cosa. La señalización es especialmente importante si hay productos para necesidades especiales (celíacos, intolerantes, vegetarianos, veganos, requerimientos religiosos, etc.)

• Deben estar bien surtidos, reponiendo los alimentos según vayan terminándose. Un puesto de comida con las bandejas y platos vacíos es de lo más triste. Procura planificar con la empresa de catering las cantidades y la forma y tiempos en que se irán sacando los platos.

• En el caso de los corners de showcooking o coctelería, es imprescindible contar con un buen profesional. Y no me refiero sólo a que sepa cocinar muy bien, además deberá saber interactuar con los invitados. Otro punto a tener en cuenta: la imagen personal y la uniformidad.

• Y hablando de personal, no está de más que en corners muy elaborados o con productos muy especiales, haya alguien ayudando al servicio de alimentos y bebidas y explicando sus composiciones, orígenes y forma de consumo. Imagina un puesto de comida mexicana, repleto de platillos... ¿no te gustaría que hubiese alguien explicándote qué es cada cosa, cómo se come y si pica o  no?

Inspiración para los corner


Comida
 
Quesos
Ibéricos
Patés
Salmón
Pescaíto frito
Espetos de sardinas
Marisco
Ostras
Caviar
Sushi
Carnes 
Hotdogs
Hamburguesas
Barbacoa
Gazpachos
Cremas
Arroces
Pasta
Ensaladas
Platos regionales
Platos del mundo
Alimentos especiales (celíacos, etc.)
Pan

 
Postres

Tartas
Cupcakes
Helados
Polos
Frutas
Fuentes de chocolate
Bombones
Manzanas de caramelo

 
Bebidas

Vinos
Sangría
Cervezas
Aguas
Limonadas y zumos naturales
Granizados
Champán
Sidras
Ginebras
Cócteles
Ponches
Cafés
Tés
Chocolate caliente


Otros

Encurtidos
Chucherías 
Algodón de azúcar
Palomitas
Frutos secos


¿Pondrás tú un corner en tu boda? ¿De qué tipo de comida o bebida?




Post relacionados:

Elegir el Menú de Bodas y No Empacharse en el Intento (I)
Elegir el Menú de Bodas y No Empacharse en el Intento (II)
El Menú o Minuta del Banquete de Bodas
Solomillo de Ternera en el Menú de Bodas. ¿Seguro?
Atrévete a Cambiar el Banquete por un Brunch (I)
Atrévete a Cambiar el Banquete por un Brunch (II) 

Consejos para una Boda de lo Más Refrescante

Casi todos los novios buscan una boda con buen tiempo y por eso eligen fecha a finales de la primavera o el verano. Y muchas veces eso significa calor, mucho calor.


Calor... eso que puede parecer insignificante, al fin y al cabo se da por hecho que en verano hace calor, puede convertirse en un verdadero infierno. Tanto los novios como los invitados pueden sufrir todo tipo de molestias: sudor, golpes de calor, insolación, incomodidad...


Para evitarlo, sólo hay que tener en cuenta unos cuantos consejos que convertirán la boda en algo mucho más refrescante. 

La bebida


Pon a disposición de los invitados contenedores con botellas de agua fría en hielo (también puede ser muy decorativo). También puedes optar por dispensadores, sobre todo si tienen un bonito diseño. Ten en cuenta este detalle también en el lugar de la ceremonia, si sabes que va a hacer mucho calor y van a estar allí durante mucho tiempo. 


Otra opción es poner bebidas un poco más elaboradas: aguas aromatizadas (con limón, naranja, especias, almíbares de flores...), limonada, naranjada, mojitos sin alcohol, té helado, etc.


En el lugar de la recepción también puedes optar por contenedores o barriles autodispensadores de cerveza bien fría. Esto último lo puedes disponer en algún corner destinado a ello.

Y, hablando de alcohol, ten en cuenta que los invitados van a consumir mucho más si hace calor. Esto hará que tengas que prever más inversión en este tipo de bebidas... o poner una amplia oferta de aguas, zumos y bebidas no alcohólicas lo suficientemente atractivas para que alternen el alcohol con otras cosas.


La comida


Procura que los menús sean más ligeros que en otras épocas del año. Evita los platos muy pesados y elaborados, las cremas y sopas calientes, los estofados, etc. Es la hora de las ensaladas, las cremas frías y las comidas que se centran en la materia prima, no en la complejidad de la elaboración. 


Cuando hace mucho calor, mi consejo es decantarse por el cóctel, el buffet o un mix de ambos, en lugar de las comidas o cenas con los invitados sentados. Da una sensación más fresca y veraniega. 


En cuanto a los postres, lo más adecuado son las frutas, sorbetes y helados. Es la forma más refrescante de terminar una buena comida en época de calor y estar preparado para una noche de baile y diversión. 


Aunque son deliciosas, evita las fuentes de chocolate en época de mucho calor y pásate a los granizados de chocolate... ¿a que se te hace la boca agua?


Tampoco pierdas de vista la tarta nupcial y encárgala con la preparación más adecuada para soportar el calor con dignidad... y seguridad alimentaria.


La ceremonia y la recepción


Si es posible, evita que la boda se celebre a mediodía en las fechas de más calor, porque esto te garantiza incomodidad durante muchas horas. Y muchos más gastos extras.


Si te vas a casar en pleno verano, visita el lugar de la ceremonia y la recepción en la misma época del año y a la misma hora en que se celebrará la boda. Así podrás comprobar el estado de las instalaciones, si tienen aire acondicionado (y funciona), cómo están los jardines y zonas verdes, si da el sol directamente en la zona en la que estarán los invitados... 


Si los invitados van a estar a pleno sol, contrata una carpa para protegerles. Esta opción también te servirá como "plan B" en caso de que haya una tormenta inoportuna.


También puedes optar por toldos, entelados y parasoles colocados estratégicamente. Es menos efectivo que la carpa... pero mucho más decorativo. En bodas en las que una parte de las mismas se celebren con sol, es imprescindible ofrecer zonas de sombra.


Algunas carpas permiten la posibilidad de poner vaporizadores que refrescan el ambiente. Ojo con esto, porque algunas de las invitadas (y tú misma), pueden terminar con el peinado arruinado por la humedad. Valora los pros y los contras de esta opción. 


El calor puede ser incómodo para tus invitados, así que procura no obligarles a pasar mucho tiempo de pie. Prevé distintas zonas donde puedan sentarse. Inclúyelas dentro de la propia decoración de la boda y conviértelas en útiles y decorativas al mismo tiempo. 


Elige los arreglos florales teniendo en cuenta la temperatura. Hay muchas flores y vegetales que soportan muy mal el calor y el sol directo. En esta época, también puedes combinar las flores con frutas, verduras y otros elementos decorativos para darle más frescura.


Y por la noche, no te puedes olvidar de esa iluminación que creará un ambiente digno de "Sueño de una noche de verano": velas, linternas, candelabros...


Si la boda es de noche, no te olvides de la protección contra los mosquitos. Puedes poner velas o antorchas con citronela o algún dispositivo (discreto) para luchar contra estos molestos insectos.


Y, aunque hemos estado hablando de calor, en determinadas zonas las noches se vuelven más fresquitas, así que si es tu caso, no te olvides de unas pashminas para tus invitadas más frioleras.


Para tus invitados


Abanicos. Tanto en el lugar de la ceremonia, como en el de la recepción, especialmente si esta se celebra al aire libre. Ten en cuenta que la inmensa mayoría de las iglesias no tienen ningún tipo de aire acondicionado y pueden llegar a convertirse en una verdadera sauna finlandesa en una tarde de julio, lo mismo ocurre en muchos juzgados y ayuntamientos. Puedes colocar un abanico en cada asiento o un cesto a la entrada del recinto para que las invitadas (e invitados) puedan tomar uno. Y, ten en cuenta también a los chicos, poniendo abanicos de hombre, que son más pequeñitos y sin estampados.


Paypays. Esta opción me encanta no sólo por el hecho de dar aire fresco a los invitados, es que además se pueden convertir el paypay en un soporte excelente para el programa de la boda o para personalizarlo con algún mensaje de los novios.


Parasoles y sombrillas. Tanto si son de mano como si son fijos, los parasoles y las sombrillas son una buena opción para mitigar el sol en el exterior. Y, por supuesto, también son un recurso decorativo de lo más interesante. Utiliza paragüeros, lecheras con diseños vintage, barriles de madera u otro tipo de contenedores originales para exponerlas.


Gafas de sol. Aunque el protocolo dice que los invitados no deberían llevar gafas de sol si se trata de una boda, no está de más poner a disposición de los invitados unos cestitos con gafas de sol para que eviten deslumbrarse con el sol... y con la radiante novia ;) Eso sí, procura que cumplan con la normativa europea para este tipo de artículos, así que no las compres en un todo a un euro.


Sombreros. Otra forma de facilitarles a tus invitados que combatan los rayos solares es poner a su disposición sombreros. Según el lugar de celebración y el estilo de la boda, puedes utilizar distintos estilos y materiales: de paja, rafia, pamelas, canotiers, borsalinos... Y un consejo: inclúyelos dentro de la decoración en corners o expositores, dan mucho juego.


Protector solar. Ya sé que no parece muy chic, pero en bodas más desenfadadas y donde los invitados van a estar mucho tiempo de día y en el exterior, no está de más colocar cestas o cubos con botes de protector solar. Puede que los mayores no lo utilicen por pudor o porque no quieren arruinar su maquillaje, pero da por seguro que las mamás estarán encantadas de proteger a sus peques.


Para vosotros, los novios


El peinado y el maquillaje que elijas debe ser adecuado para el calor. Esta época requiere un esfuerzo extra para que el cabello y el make up se mantengan en perfecto estado durante toda la boda. 


Elige un vestido de novia ligero y, en caso necesario, encarga un segundo vestido para afrontar con comodidad la parte más larga de la boda: la recepción. 


Si prevés que las temperaturas van a ser muy altas, quizás debas prescindir del velo o de la mantilla y optar por tocados más cómodos.


No te olvides de los antitranspirantes para evitar manchas indiscretas en tu traje.


Elige zapatos cómodos y de tu talla (el novio también), porque el calor provoca rozaduras y molestias, incluso con el calzado más ligero.  


Dos de los complementos que no puedes olvidar en verano: el abanico y la sombrilla de novia. No sólo te será útil, además es un detalle precioso y femenino. 


El ramo y el boutonniere del novio deben estar confeccionados con flores resistentes al calor, así que consulta con tu florista cuáles son las que te recomienda para esa época.


Ten prevista una camisa de repuesto para el novio, porque es fácil que acabe con ella empapada en sudor. Ya sabes que los chicos suelen ser más propensos a transpirar que nosotras.


¿Te gustan estas ideas para una boda refrescante, incluso en pleno verano?





Post relacionados:

Elegir el Menú de Boda y No Empacharse en el Intento (I)
Elegir el Menú de Boda y no Empacharse en el Intento (II)
8 Consejos para la Recena
Ideas Originales para la Recena (I)
Ideas Originales para la Recena (II)
Alternativas a la Tarta Nupcial
Consejo Útil Si Vas a Regalar Abanicos

Cómo Evitar que Tu Vestido Sea Tu Enemigo (I)

Cómo Evitar que Tu Vestido Sea Tu Enemigo (II)

Escote Palabra de Honor: ¿Acierto o Error? 

8 Consejos para Elegir el Ramo de Novia

Consejos para Elegir y Llevar el Boutonniere (I)

Consejos para Elegir y Llevar el Boutonniere (II)

Cómo Decir: No Estás Invitado a la Boda

Si estáis organizando vuestra boda, casi seguro que se ha producido alguna situación incómoda, en la que alguien ha dado por hecho que estaba invitado, cuando no es así. 


Familiares con los que tenéis poco o ningún contacto, colegas de trabajo, compañeros del gym, vecinos, conocidos y saludados... todos son susceptibles autoinvitarse a la boda. Y eso puede suponer un problema. 

Nadie debería asumir que está convidado a la boda, ni siquiera las personas más cercanas. Sois vosotros los que decidís con quiénes queréis compartir ese día, no ellos. De hecho, una persona con un mínimo de educación y respeto, no da nunca por hecho que está convocado a un evento, salvo que reciba la invitación o se le comunique expresamente.


Aunque el momento de decirle a alguien que no está en la lista de asistentes es muy incómodo para ambas partes, es mejor hacerlo cuanto antes... y de forma lo más cortés posible. 


Eso no quiere decir que tengáis que justificaros por no invitar a alguien a la boda; simplemente podéis ofrecer una razón, cierta o no, para no herir sus sentimientos. Soy de las que cree firmemente en que el equilibrio entre la asertividad y la delicadeza. 


Algunos de esos motivos que podéis dar para no invitar a algunas personas son:


1.- Que vuestro presupuesto es muy limitado. 

Invitad atendiendo a dos factores: el presupuesto y el corazón.

La razón: los invitados deberían saber que, aunque os regalen dinero, la boda no cuesta sólo el cubierto (que es lo que muchos asistentes suelen aportar) multiplicado por el número de asistentes, sino muchas más partidas que se incrementan si la lista de invitados es más larga (invitaciones, menús, regalos, etc.); por eso, cuánto más grande sea la boda, más cara será. Si tenéis pocos recursos, lo más lógico es que busquéis una boda íntima y económica.

 
Quién no lo entenderá: el que piensa que con el regalo en dinero está todo más que cubierto. En general este motivo no suele comprenderlo aquél que no ha conocido estrecheces económicas.


2.- Que sólo invitaréis a la familia y amigos más cercanos.


La razón: vamos, que queréis una boda íntima; por vuestro carácter, vuestras circunstancias o vuestras preferencias.

 
Quién no lo entenderá: el que sobreentienda que es familia o amigo íntimo, aunque se trate del vecino del cuarto del edificio donde pasaste tu niñez y del que no recuerdas ni el nombre. Tampoco el que no comprenda el concepto de evento íntimo y crea que todo lo que no esté a la altura de una boda real no tiene razón de ser.


3.- Que vuestras familias son muy numerosas y no vais a poder invitar a los amigos. 

 
La razón: la costumbre dicta que debería estar la familia antes que los amigos a la hora de preparar la lista de invitados, no parece que eso sea algo difícil de entender.

 
Quién no lo entenderá: el que se sienta familia, aunque no lo sea.


4.- Que sólo queréis una boda entre amigos.

Una boda sólo entre amigos: ¿por qué no?

La razón: que deseáis una boda divertida e íntima, sin compromisos familiares, justo al contrario que en el punto anterior. Hay parejas que tienen padres divorciados de forma poco amistosa, con hermanos con los que no se hablan desde hace décadas u otras situaciones familiares delicadas; por lo que prefieren prescindir de toda la familia, para evitar problemas. 

 
Quién no lo entenderá: el que esté muy apegado a las normas y tradiciones. También el que crea que, por tener algún vínculo familiar, tiene pleno derecho de asistir a la boda; incluso si no tiene trato con los novios.


5.- Que el lugar donde vais a celebrar la ceremonia o el banquete tiene un aforo limitado. 


La razón: es obvia, si no hay espacio, no hay espacio. Si el aforo es de 100 personas, difícilmente se podrán encajar a 150, al menos de forma confortable... y legal. 


Quién no lo entenderá: aquél que crea que si el sitio es pequeño, deberiais eliminar a otras personas, no a él. Si es el perejil de todas las salsas, lo normal es que otro más insignificante le ceda el lugar, literalmente (léase con profunda ironía).


6.- Que no tenéis muy claro todavía a quiénes vais a poder invitar. 

 
La razón: si se sabe leer entre líneas, cualquiera se daría cuenta de que es una excusa amable para decir que no se está invitado. 

 
Quién no lo entenderá: los que tengan poca perspicacia y habilidades sociales tendentes a cero. Tampoco lo comprenderá el que piense que no podéis casaros sin que esté allí (también con ironía, of course).


7.- Que estará invitada alguna persona con la que tienen diferencias irreconciliables. 

 
La razón: si ya habéis invitado a su némesis a la boda, esa persona no desearía estar en vuestra boda por nada del mundo; primero porque no querría pasar un mal trago y, segundo, porque evitaría por todos los medios la tentación de una agria discusión que os arruinaría la boda.

 
Quién no lo entenderá: el que sea muy soberbio y piense que quien tiene que renunciar a ir a la boda es la otra persona. También al que no le importe que se arme un buen escándalo, aunque se trata del día de vuestra boda.


En cualquier caso, cualquier persona mínimamente observadora y considerada, se daría cuenta de que todos los motivos anteriores, son una forma elegante y educada de decir que esa persona no está invitada... y punto.


Si la cosa se complica, hay varias alternativas:

• Recurrir a un tercero para que comunique a esa persona de forma clara (y respetuosa, por favor) que no está en la lista de asistentes. Hay ocasiones en las que un mediador, por decirlo de algún modo, quita hierro al asunto. Eso sí, la persona que haga de mensajero, debería tener presente que es fácil que termine siendo el blanco de las iras del no-invitado.

 

• Invitarle sólo a la ceremonia, sobre todo si se ha alegado que el lugar del banquete es pequeño. Si está realmente interesado en acompañaros ese día, no le importará no asistir a la recepción. Otra opción válida es convidarle únicamente al baile.

 

Los invitados deben haceros sentir cómodos

• Hacer una comida o cena con esas personas a las que no habéis invitado para celebrar que os casáis. También puede ser un café o unas cañas después de la jornada laboral, todo depende de las personas y de la relación que os una. Podéis hacer esa reunión antes o después de la boda, en privado con cada persona o pareja o reuniendo a distintos grupos afines. Esta opción es ideal para las personas a las que no queréis (o no podéis) invitar, pero con las que deseáis tener algún tipo de detalle. 

Tanto desde mi experiencia personal como profesional en el sector nupcial, os puedo decir que este tipo de situaciones son delicadas, pero que suelen ser menos problemáticas en la realidad que en la práctica. 

 
Y, además, hay un mal que remedia todo: el tiempo. Pasados unos meses, los que se sientan agraviados por no haber estado invitados a la boda, lo olvidarán... y vosotros también. 



Post relacionados:

Todo lo que Necesitas Saber Sobre las Invitaciones de Boda (I)
Todo lo que Necesitas Saber Sobre las Invitaciones de Boda (II)
Todo lo que Necesitas Saber Sobre las Invitaciones de Boda (III)
6 Ideas para Preparar (Bien) la Lista de Invitados
Protocolo al Dar la Enhorabuena a los Novios
Protocolo para el Regalo de Bodas. Invitados