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03 junio, 2020

Mesas de Boda: ¿Con o Sin Mantel?

Hasta hace poco tiempo nadie se planteaba poner mesas rectangulares en la boda, porque se daba por hecho que las mesas debían ser redondas... y punto. Lo mismo sucede con las fundas de las sillas, que eran imprescindibles en cualquier evento particular o corporativo y que ahora se consideran anticuadas. Y también con las mantelerías. La mayoría de las parejas no se habrían cuestionado hace 2 o 3 años si poner manteles en las mesas de su boda o no hacerlo.


No tienes más que ver las propuestas que hacen los decoradores de bodas en Pinterest o Instagram para darte cuenta de que las mesas desnudas son tendencia. Y muchas de esas mesas son tan bonitas que hacen olvidarse de las mantelerías inmediatamente.


Personalmente me gustan mucho las mesas desnudas, aunque lo cierto es que no siempre son la mejor opción. Hay que tener en cuenta varios factores para decidirse por mesas sin manteles o sin ellos.


Para ayudarte a decidir si las mesas de tu boda irán vestidas con manteles o lucirán sin ellos, a continuación encontrarás algunos consejos.


¿Me acompañas a la mesa?


Mesas de boda: ¿con o sin mantel?


Con mantelería


Cuándo usar mantelería


En espacios con una arquitectura y decoración interior muy tradicionales, sobre
todo si son interiores.


Cuando sea una boda muy formal.


Cuando quieras una decoración con un estilo clásico.


En caso de que busques un efecto muy lujoso.


Mesa de boda con mantel


Si las mesas que hay en el lugar de celebración tienen un diseño o un estado que requiere esconderlas.


Consejos para acertar


La mantelería debe estar en perfecto estado, tanto el mantel como el sobremantel y las servilletas.


Es fundamental que esté perfectamente planchada.


Toda la mantelería debe combinar con el estilo de la boda y con el de la decoración del lugar en el que se celebre la recepción.


Mesa de boda con mantelería combinada con el resto de la decoración


Si la mantelería es demasiado sobria, puedes utilizar caminos de mesa para aportarles un toque personal.


La vajilla y la cristalería debe encajar en cuanto a estilo y paleta cromática con la mantelería.


No te olvides de los centros de mesa y otros elementos decorativos que la aporten personalidad a las mesas.


En mesas con mantelería, te recomiendo que evites las sillas con funda, porque recarga demasiado el conjunto. De hecho, siempre sugiero a las parejas con las que trabajo que eviten siempre las sillas con funda, tanto si se deciden por mesas con mantel o por mesas desnudas. Están muy desfasadas y ahora hay un abanico de sillas para eventos amplísimo y con modelos realmente magníficos.


Sin mantelería


Cuándo prescindir de la mantelería


En espacios singulares, sobre todo en exteriores.


En bodas con un estilo informal y relajado.


Si buscas un estilo rústico, playero o industrial, por ejemplo.


Cuando las mesas tengan un diseño que aporte valor a la decoración y merezca la pena lucirlas sin mantelería. Y si están en buen estado, sin manchas, decoloraciones y desperfectos, por supuesto.


Mesa de boda sin mantel


Consejos para acertar


Cerciórate de que la textura de la mesa es agradable para los invitados. Por ejemplo, si se trata de madera, que no sea demasiado áspera o que tenga astillas. O que la superficie no sea muy fría al tacto, en caso de que se trate de cristal y el ambiente sea fresco. O que si se trata de algún tipo de superficie plástica, que no haga que los invitados acaben con las manos o los antebrazos sudados si los colocan sobre la mesa. Si esto ocurre, puedes minimizarlo colocando manteles individuales que los protejan.


La vajilla y la cristalería deben combinar con el estilo de la propia mesa, de los centros que elijas y de cualquier otro elemento decorativo que quieras añadir.


Si quieres vestir un poco más la mesa, puedes usar caminos de mesa o manteles individuales.


Mesa de boda desnuda con camino de mesa


No te olvides de las servilletas, una cosa es que no pongas mantel y otra muy distinta que te olvides de las servilletas.


Las servilletas siempre deben ser de tela, incluso aunque la boda sea informal. Al fin y al cabo se trata de un evento tan especial como una boda, por lo que hay que mantener unos mínimos en las formas.


Los platos, copas y cubiertos deben estar perfectamente colocados. Esto es importante, porque si a la informalidad de una mesa sin mantel se le suma cierto desorden, acabará pareciendo una comida de domingo en un merendero a la orilla de un pantano.


Cuidado con el minimalismo extremo, porque en una mesa sin manteles puede resultar tan espartano que parezca soso.


¿Has decidido ya si las mesas de tu boda irán vestidas con manteles o irán desnudas?




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La primera vez que apareció el post Mesas de Boda: ¿Con o Sin Mantel? fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?


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