Seguro que conocéis la Ceremonia de la Arena, porque se ha convertido ya en un clásico en las ceremonias de boda.
Si no es así, os cuento en qué consiste: se trata de una ceremonia simbólica que se lleva a cabo con arena. Cada uno de los miembros de la pareja lleva un recipiente que la contiene y ambos la vierten en un contenedor más grande, de modo que ambas arenas se unen en su interior. Simboliza que los novios aportan su individualidad al proyecto común que es el matrimonio. Como veis es un ritual con un significado profundo y con estética muy atractiva.
Hay variantes en las que se utilizan arenas de diferentes colores. También se llevan a cabo con arena del lugar de procedencia de cada contrayente o de playas que la pareja ha visitado. Hay otras en las que se usa tierra en lugar de arena, incluso luego se planta una semilla o un pequeño árbol después.
Pero hoy quiero compartir con vosotros una fórmula que usa la Ceremonia de la Arena como base, pero que permite participar a algunos invitados, o incluso a todos si la boda es pequeña.
El desarrollo
♥ La parte principal sigue siendo la misma. Cada uno de los miembros de la pareja porta un recipiente con arena y la vierte en el contenedor común.
♥ La diferencia estriba en que, además de los novios, participan varios invitados o incluso todos ellos.
♥ Por lo tanto, además de los vuestros, se preparan pequeños recipientes para el resto de los participantes, también con arena.
Foto: Otto Blues
Boda organizada por: ¿Quién dijo boda?
Los participantes
♥ Los participantes pueden
ser los padrinos y los padres, aunque también se le pueden sumar los
hijos (si los tenéis), los testigos, los hermanos, los abuelos, los
amigos más cercanos...
♥ Si la boda es íntima y
los invitados pocos, pueden participar todos ellos. Pero si es una gran
boda no es recomendable, porque la ceremonia perderá fuerza y se
alargará demasiado.
♥ Lo ideal es que los
invitados que compartan la ceremonia puedan decir unas palabras, aunque
sería conveniente que fueran intervenciones cortas y emotivas.
El orden
♥ El orden a la hora de verter la arena es importante, porque debe tener cierta lógica.
♥ Una
opción sería que comenzasen contribuyendo con la arena vuestros padres o
aquellas personas que conforman la base de vuestra vida hasta entonces.
Los que os han dado la vida, amor, educación, valores, seguridad...
Luego pueden seguir los amigos y aquellas personas que complementan lo
que os ha aportado la familia más cercana. Finalmente cerraríais
vosotros con las arenas de ambos, que podéis verter primero uno y luego
otro, o bien hacerlo al tiempo.
♥ También podéis seguir el orden contrario, si lo consideráis más apropiado para vosotros.
♥ Incluso
primero pueden participar los padres, luego vosotros y cerrar los
amigos y otras personas que os complementan, para indicar que sois el
centro de vuestro matrimonio.
♥ Las opciones son infinitas y todas perfectas. Sólo tenéis que encontrar la vuestra.
La arena
♥ Las arenas pueden ser todas del mismo color, las vuestras y las de los participantes.
♥ Podéis elegir un color para cada uno de vosotros, de modo que los invitados elijan color según la relación que tienen con cada uno.
♥ También podéis escoger diferentes colores para cada invitado.
♥ Si tenéis hijos en común, es una bonita idea que su recipiente tenga arena de vuestros dos colores.
♥ Personalmente me gusta la opción de dos o más colores, porque al verterse una detrás de otra crea diseños originales dentro de la botella.
Los recipientes
♥ Mi consejo es que tanto vuestros recipientes individuales como el común sean de cristal transparente y que tengan un diseño bonito. Los de los invitados puedes ser de cualquier material: conos de papel, botellitas de cristal o cerámica...
Foto: ¿Quién dijo boda?
Boda organizada por: ¿Quién dijo boda?
En este caso el recipiente no tenía tapa, por lo que se usó papel de
burbujas para sellarlo y que se mantuviese el diseño de la arena
intacto hasta que llegó a su destino.
♥ Es importante que el recipiente común, en el que se verterán todas las arenas, tenga tapa.
♥ Para que no se mueva el diseño de la arena tal y como quedó durante la ceremonia se puede verter una pequeña cantidad de cera derretida para que cree una especie de sello.
♥ Si ese día no podéis encargarle a nadie que selle la arena, podéis pedir que pongan papel de burbujas, papel o plástico bien apretado y luego colocar la tapa. Así podréis llevarlo a casa sin que se desmorone la arena en su interior.
♥ Para los invitados, sobre todo si son muchos, podéis elegir contenedores individuales más sencillos. Pueden ser conos, bolsas, cajas...
Dónde colocarlos
♥ Es importante que el lugar en el que coloquéis la arena para los invitados sea accesible y que cada contenedor esté bien asegurado para que no se derrame. Mi consejo es que los recipientes individuales estén situados en la mesa de ceremonias, porque si deben tenerlo en la mano durante la boda o recogerlo en un lugar lejano, seguro que terminará por haber más granos de arena sobre el vestuario de los invitados, en las sillas y en el suelo que en los contenedores.
¿Te gusta esta versión tan participativa de la Ceremonia de la Arena?
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La primera vez que apareció el post Una Ceremonia de la Arena Diferente fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?
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