Esto implica que, si se trata de la novia, debe trasladarse ella... junto con su vestido. Y desplazarse con un traje de novia es una tarea algo complicada.
La inmensa mayoría de tiendas de vestidos de novia y atelieres se niegan, con razón, a encargarse del envío del traje al destino donde se celebrará la boda, por lo que la tarea recae en los propios novios.
Por eso, a continuación te doy las claves para transportar tu vestido de novia con todas las facilidades posibles.
Cómo embalarlo
En cuanto a la forma de embalar tu vestido para su transporte tienes dos opciones:
Bolsa portatrajes
En este caso el portatrajes debe tener un tamaño suficiente para albergar el vestido, con la menor cantidad de dobleces y arrugas posible. En este caso es importante mantener la percha, para poder colgar la funda fácilmente y evitar que el vestido se pueda escurrir dentro de ella.
No te olvides de colocar el vestido con el frontal del cuerpo hacia la parte donde está la cremallera. Así podrás introducirlo, sacarlo y colocarlo sin problemas.
Es la forma ideal de llevarlo en cualquier medio de transporte como equipaje de mano o en vehículo particular. No te lo recomiendo, eso sí, si lo envías por mensajería o lo llevas en autocar.
Caja de cartón
Es el modo perfecto de embalar el vestido de novia si lo vas a facturar, si va a ir en el compartimento de equipajes de un autobús o si tiene una falda muy voluminosa.
Lo menos recomendable: las maletas |
Coloca papel de seda en los dobleces, para evitar las marcas. Y en el fondo y sobre el vestido doblado, para que no se desplace dentro de ella.
Tampoco estaría de más que forrases la caja con plástico una vez cerrada, por si se mojase o rompiese durante su transporte.
La única manera de trasladar tu vestido de novia que no te recomiendo es la maleta. Por muy grande que sea, tendrás que hacer demasiados dobleces para que quepa, por lo que llegará sumamente arrugado a su destino.
Cómo doblarlo
Uno de los requisitos principales para que tu vestido se arrugue lo menos posible es doblarlo correctamente.
Para ello te doy algunos consejos:
Pide consejo en tu tienda o tu atelier para que te indiquen cuál es la mejor manera de doblar tu vestido. En principio deberían ser quienes mejor te asesorasen al respecto.
No dobles tu vestido con prisas, porque cuando lo saques en tu lugar de destino estará más arrugado que un acordeón. Hazlo cuidadosamente y con tiempo suficiente.
Dóblalo fuera de su contenedor, sobre todo si vas a utilizar una caja. Hazte una idea de las dimensiones del lugar donde lo vas embalar y dóblalo antes. Incluso si vas a transportarlo en una funda para trajes, deberías doblarlo antes de meterlo en ella, sobre todo la falda en sentido vertical.
Comienza a doblar la falda siempre en sentido vertical, metiendo los extremos hacia el interior. Toma como referencia el ancho del cuerpo del vestido a la hora de doblar. Si la falda es muy voluminosa, tendrás que doblarlo dos veces por cada extremo, si es una falda sencilla, con un doblez será suficiente.
Una vez doblada la falda en vertical, hazlo en sentido horizontal. Esto es importante si tu traje es largo. Hazlo también en una o dos veces, teniendo en cuenta su largo y el tamaño de la funda o la caja. Como en el caso anterior, hazlo siempre hacia en interior, en dirección al corpiño.
Pon papel de seda entre cada doblez que hagas al vestido, así no se marcarán las arrugas durante el transporte.
Rellena también con papel de seda el corpiño para que mantenga su forma y no se arrugue. Hazlo también entre las distintas capas de la falda.
También deberás colocar papel de seda en el fondo de la caja o la funda, los laterales y sobre el vestido; así evitarás que se desplace y aparezcan las temidas arrugas.
Ten cuidado con los lazos, adornos y aplicaciones a la hora de doblarlo, cuidando de que no se deformen o se arruguen.
Si vas a utilizar una caja, saca la percha del vestido antes de doblarlo, puesto que puede dañarlo durante el viaje. Llévala aparte para colgarlo en destino.
A la hora de viajar
En avión
Nunca jamás factures tu vestido de novia a la hora de viajar en avión. Salvo que quieras arriesgarte a que se pierda tu equipaje y te encuentres sin traje de novia el día de la boda. No será la primera vez que ocurre. Y en este caso la posible indemnización jamás te resarcirá del disgusto que te llevarás si llega el gran día y no puedes estrenar tu vestido.
Deberías llevarlo como equipaje de mano. Para ello te recomiendo que consultes previamente las normas de la compañía en la que viajes, para saber las dimensiones máximas que debe tener el contenedor. Que no se te olvide este paso... o te puedes encontrar con la necesidad de facturarlo.
Si los vas a llevar como equipaje de mano, te recomiendo siempre un portatrajes, resistente y lo más grande posible que te permita la aerolínea.
Cuando vayas a subir al avión, coméntale con amabilidad a la tripulación lo que llevas en la funda. La mayoría de auxiliares de vuelo suele ser bastante sensible al respecto, por lo que te ayudarán a colocarlo en el mejor sitio posible. Incluso, aunque las normativas son estrictas, hay veces que te colocarán incluso el traje colgado en el armario que tienen para su propio vestuario. Si llevas un pequeño detalle (bombones, caramelos...) a la tripulación, es más fácil que consigas un trato preferente para tu vestido de novia, puesto que la teoría dice que no puedes colgarlo dentro del avión, lo que implica que tendrás que meterlo en el portaequipajes. No es que tengas que comprar su atención, pero si es una manera de demostrarles que agradeces su amabilidad. Un precio pequeño para un gran beneficio, ¿no te parece?
Algo que también puedes valorar, aunque tiene su precio, es comprar un asiento extra para el vestido. Pero, ojo, deberías consultar a la compañía la posibilidad de hacerlo y sus tarifas.
Tenlo siempre a la vista en los aeropuertos, por si acaso aparece algún amigo de lo ajeno o te despistas por los nervios o las prisas.
En tren
En este medio de transporte también te aconsejo que utilices una funda para trajes, por tu comodidad.
Deberás utilizar los espacios habilitados para colocar el equipaje dentro del vagón. Te aconsejo que cuides su colocación y que lo vigiles de vez en cuando durante el viaje, para cerciorarte de que no se ha movido en su ubicación y para que no desaparezca.
Otra opción que puedes tener en cuenta es el servicio de recogida y entrega de equipajes a domicilio que tiene Renfe, asociado a la compra del billete. Te recogerán un número determinado de bultos en casa antes del viaje y te lo entregarán donde tu elijas. Tiene un coste bastante razonable, por lo que puede ser una buena elección. En este caso, deberías empaquetarlo en una caja, no en un portatrajes, y avisar previamente de su contenido.
También puedes consultar la posibilidad de comprar un billete extra para tu vestido y llevarlo al lado.
En autobús
En este caso tendrás que colocar el vestido en el compartimento de equipajes, puesto que el único equipaje de mano que se suele permitir es un bolso o contenedores similares de pequeño tamaño.
Si lo transportas en autobús, te recomiendo que preguntes a la compañía la mejor forma de embalarlo. Aunque generalmente la mejor manera de llevarlo sería una caja, avisando al conductor de su contenido, para que tenga cuidado a la hora de colocarlo en el compartimento.
Los servicios premium de muchas compañías de autocares tienen compartimentos especiales para los trajes, así que valora si te interesa invertir un poco más en tu billete e ir más tranquila.
En vehículo particular
En este caso, lo ideal es llevarlo en una funda, salvo que sea muy voluminoso, en cuyo caso es mejor que optes por una caja.
Puedes colgar el gancho de la percha en los asideros que tienen los coches en la zona posterior; dejando la parte de la falda bien estirada sobre los asientos.
También puedes colocarlo bien estirado sobre los asientos, teniendo cuidado de que la parte delantera del vestido quede hacia arriba.
En algunos vehículos con maletero amplio, puedes valorar la posibilidad de ponerlo estirado dentro de él, sobre las maletas y asegurándolo en caso necesario para que no se mueva.
Si el viaje es largo, tendrás que hacer las correspondientes paradas para refrescarte y estirar las piernas, por lo que te recomiendo no dejarlo nunca sin vigilancia. Por si algún ladrón tiene malas intenciones y no sólo te abre el coche, sino que te deja sin vestido y con un disgusto monumental.
Por mensajero
Puedes enviar tu vestido a través de una mensajería de confianza, siempre que lo hagas bien empaquetado en una caja resistente y forrada de plástico por si llueve mientras se manipula ésta en el exterior o se deposita sobre un suelo húmedo.
Te aconsejo que contrates un seguro y que informes del tipo de mercancía que lleva la caja, para que tengan más cuidado. El seguro no te cubrirá el disgusto si te lo pierden o si se retrasa su entrega, pero al menos recuperarás parte de su importe.
Indica claramente la dirección de destino, la persona que lo recogerá y un teléfono de contacto por si surgiese algún problema a la hora de su entrega.
Hazlo con tiempo suficiente, por si hubiese alguna incidencia en el transporte.
Más consejos
A la hora de transportar el vestido no le pongas peso encima en ningún caso, así evitarás marcas y arrugas.
Saca el vestido de su embalaje con suficiente antelación en el lugar de destino. Si puede ser el día antes, mucho mejor. Déjalo bien colgado para que pueda irse estirando con su propio peso.
Colócalo en un lugar con poco paso, para que no haya la posibilidad de accidentes. Y que no esté expuesto al calor, al sol o otros elementos que puedan dañarlo.
Ojo si hay mascotas en el lugar donde vayas a colgar tu vestido, porque puedes llevarte un susto. Para un perro travieso o un gato curioso, tu vestido no es más que un juguete... Cierra bien la puerta y no permitas que entren en la habitación en la que esté tu traje, al menos sin supervisión permanente.
Ten localizada una buena tintorería en el lugar donde vayas a celebrar tu boda, por si fuese necesario un planchado rápido antes de la boda. Habla con ellos con antelación, para que estén avisados y que te informen de horarios y precios. Si vas a un hotel, habla con recepción antes de tu llegada, para que sean ellos los que hagan de intermediarios con la tintorería con la que trabajen.
Ten también la dirección y teléfono de una modista in situ, por si durante el viaje el vestido hubiese sufrido algún percance. No es lo habitual, pero no está de más estar preparada para los imprevistos.
Espero que con estos consejos tu vestido llegue a su destino en perfectas condiciones.
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La primera vez que apareció el artículo Consejos para Transportar Tu Vestido de Novia Sin Disgustos fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?
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