29 marzo, 2023

Cómo Elegir y Lucir el Chaleco del Novio

En este post quiero darte todas las claves acerca de una de las prendas que puede formar parte del outfit del novio, pero que no todos eligen: el chaleco.

 

El chaleco realza el traje de novio, aportándole personalidad, presencia y formalidad. Es una prenda con un punto divertido, incluso dentro de la formalidad. 


A continuación encontrarás cuáles son los pros y contras del chaleco del novio, cómo elegirlo cómo lucirlo con estilo.


Cómo elegir y lucir el chaleco del novio

 

Pros

 

Como norma general, cuantas más capas de ropa lleva un hombre, más elegante y formal es su atuendo. Y un chaleco es una capa más, al fin y al cabo.   

 

Es uno de las pocas prendas o complementos con los que el novio puede reflejar su personalidad,  porque los atuendos masculinos, por lo general, están más limitados.

 

Si te vas a quitar la chaqueta en algún momento de la boda, te permitirá seguir manteniendo un aspecto más elegante y formal que si llevases únicamente la camisa. 

 

En caso de que prefieras no llevar chaqueta, el chaleco te aportará un aire más original y festivo, y también le restará informalidad al hecho de ir en mangas de camisa. 

 

Novio con camisa, chaleco y boutonniere en la mano

 

Además, si no vistes chaqueta, el chaleco te permitirá llevar un boutonniere, algo que no podrás hacer (al menos no con cierta dignidad) si únicamente llevas una camisa. 

 

Para los chicos más fornidos es una solución estupenda, porque no tendrán que abotonarse la chaqueta. 

 

Si compras un chaleco con un tejido y un diseño no demasiado nupcial, luego lo podrás utilizar después de la boda.

 

Contras

 

El chaleco abriga, sobre todo si está confeccionado con un tejido grueso y tupido, por lo que quizás no sea la mejor opción si eres muy caluroso o si en la fecha de la boda es más que previsible que las temperaturas sean muy elevadas. 

 

Otro inconveniente es que, si eres muy corpulento, te puede hacer ver más voluminoso.

 

Es fundamental elegir el diseño, la textura y el color con acierto, porque en caso contrario es fácil parecer disfrazado.

 

El chaleco supone un coste añadido, no excesivo, pero que sí hay que tener en cuenta.

 

Novio con traje de tres piezas

 

¿Comprar o alquilar?

 

Lo ideal es que te confeccionen el chaleco a medida, así te quedará como un guante.  


También lo puedes adquirir ya confeccionado. Si no te ajusta bien, siempre puedes pedir que te hagan algunos arreglos para que te quede perfecto.

 

Si no quieres gastar dinero en el chaleco, puedes alquilarlo si lo deseas. Cuando elijas tu traje de alquiler, no tendrás más que decidirte también por una de estas prendas.

 

Novio abrochándose el chaleco

 

La elección

 

Hay muchos más diseños de chaleco de los que piensas: con o sin solapas, con formas de solapa diferentes, con más o menos botones, con o sin bolsillos...

 

El color puede ser el mismo que el del traje, o de la chaqueta o el pantalón si no van coordinados, pero también lo puedes elegir de un tono que armonice o incluso que contraste. Hay muchos novios que llevan el chaleco de un tono que combine con algún color que lleve la novia en su atuendo o que esté dentro de la paleta que se haya elegido para la decoración de la boda. 

 

La textura también puede ser la misma que la del traje o la chaqueta, aunque también podrás escoger otra, siempre que sea similar o más ligera. 

 

El estampado puede ser todo lo original que quieras, pero siempre con buen gusto. Si no se te da muy bien eso de elegir y coordinar tu ropa, pide consejo a alguien de tu confianza (y que sea estiloso y elegante, claro) o decántate por un estampado discreto y elegante que armonice con el traje y la camisa. O elige un tejido de un liso...

 

El tejido debe ser apropiado para la época del año en que se celebre la boda. Debe ser más grueso en invierno y más ligero si hace calor. En caso de que las temperaturas vayan a ser muy altas, quizás deberías plantearte no llevar chaleco. 

 

Si lleva solapas, éstas deben ser más estrechas que las de la chaqueta. 

 

Las solapas son más tradicionales y aportan más dimensión al traje.

 

Chaleco cruzado con solapas

 

Puede tener escote en forma de V o de U. El escote en V es más ponible y actual, mientras que en U es más tradicional, formal y elegante. 

 

El número de botones dependerá del diseño, pero también de tu altura. Cuanto más alto seas, más botones llevará el chaleco. Lo habitual es que tengan entre 4 y 5. 

 

Normalmente llevan botonadura en línea, pero también los hay con ella cruzada. La botonadura simple se suele llevar siempre sin solapas.

 

Cómo lucirlo con estilo


El último botón del chaleco, al igual que en el caso de la chaqueta, debe ir desabrochado.

 

Si el chaleco lleva forro en la espalda en lugar de ser del mismo tejido que la parte frontal, está diseñado para llevarlo con chaqueta. De esa forma el forro de la chaqueta no se enganchará con la espalda del chaleco. Si no vas a llevar chaqueta evita los modelos que llevan forro.  

 

La chaqueta debe ser lo suficientemente abierta para que se vea el chaleco.  


Novio con traje tres piezas

 

Nunca se debe llevar chaleco con una chaqueta cruzada, porque el chaleco no se verá y lo único que conseguirás es parecer más grande, por no hablar de que te impedirá moverte con comodidad.

 

Si lleva trabilla en la espalda, podrás ajustarla o soltarla un poco si vas a estar sentado mucho tiempo o si te sientes hinchado.

 

Debe tapar completamente la camisa, sin que se vea nada de ella entre el borde del chaleco y el pantalón, cubriendo la cinturilla de este. 

 

Cuando se lleva un traje de 3 piezas lo más recomendable es elegir corbata en lugar de pajarita. Aunque la decisión, por supuesto, es tuya.

 

Lo ideal es no llevar cinturón, optando por los tirantes para sujetar al pantalón. ¿El motivo? Que el cinturón suele crear una especie de abultamiento poco favorecedor bajo el chaleco, que suele ir ajustado. Un consejo más: nunca se deben llevar tirantes y cinturón al mismo tiempo. Esa doble seguridad a la hora de sujetar tus pantalones no tiene sentido... ni elegancia.

 

Procura que el chaleco no te quede ni ancho ni estrecho. Cuida especialmente que los botones no parezcan a punto de estallar cuando te sientes. 

 

¿Qué opinas ahora del chaleco? ¿Lo llevarás el día de tu boda?


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22 marzo, 2023

Así Debe Ser la Tarta de Boda Ideal

Las tartas de boda vuelven a ser tendencia. Si hasta hace poco triunfaban los postres individuales, poco a poco los pasteles nupciales retoman su protagonismo, especialmente en su versión más deliciosa y sofisticada.


Las parejas de novios buscan tartas ricas, casi gourmet, pero que también sean muy visuales, porque ya casi todo en la boda debe ser totalmente instagrameable. Fotografiarla antes de cortarla, inmortalizar el momento del corte de la tarta y disfrutarla como el broche perfecto para el menú son los motivos para que esta dulce tradición regrese con fuerza.


Así que en este post quiero daros algunas claves para conseguir una tarta de boda realmente perfecta.


Así debe ser la tarta de boda ideal


Antes de nada, planteaos si realmente queréis una tarta de boda. No os dejéis llevar por las tendencias, por la costumbre o por los consejos de los demás. Si os apetece tener un bonito pastel, cortarlo con fotografías y ceremonia incluidas y compartirlo con los invitados, adelante. Si no es así, es mejor que escojáis un magnífico postre que os agrade. 

 

No elijáis la tarta nupcial hasta que no hayáis escogido lo realmente fundamental en la boda, que sería el tipo de boda, el lugar, la época del año, el número de invitados, el estilo que queréis imprimirle al evento, la paleta de color y, por supuesto, el presupuesto. Una vez que tengáis todo esto decidido, ya podréis comenzar a pensar en la parte más dulce: la tarta. 

 

El presupuesto es decisivo a la hora de escoger la tarta, especialmente si este es ajustado y deseáis un pastel muy especial y elaborado. Aunque hay otras partidas que son mucho más costosas, lo cierto es que hay tartas de boda que pueden suponer un extra que se sume a otros muchos y que desestabilice vuestras previsiones económicas.

 

Tarta nupcial

 

Algunos proveedores de gastronomía incluyen la tarta en el precio del menú. Eso puede ser interesante si no queréis un pastel muy lujoso y personalizado, porque normalmente son dulces simplemente correctos, nada más, pero no os supondrán un coste extra. 

 

Una opción que podéis tener en cuenta es la de aceptar la tarta que os ofrezca el proveedor de gastronomía y servirla en la mesa dulce ya cortada en porciones, y encargar un pastel maravilloso para finalizar la comida o la cena con broche de oro.

 

La elección del profesional de repostería es fundamental, porque la calidad, el sabor, la estética y la seguridad dependen de ello. 

 

Hablando de seguridad, debéis tener en cuenta que en la mayor parte de los espacios únicamente os permitirán servir una tarta confeccionada fuera de sus instalaciones si el repostero cuenta con todos los permisos y licencias correspondientes. En otros casos ni siquiera con ellos os dejarán que se sirva un pastel que no sea suyo. Por otra parte, también debéis saber que podrían cargaros un extra por el servicio de la tarta ajena (platos, cubiertos, corte, servicio de los camareros...). 

 

Tarta de boda

 

Buscad inspiración en Internet, guardad fotos para mostrar al repostero lo que estáis buscando, pero también tened en cuenta que la tarta de la foto puede que no sea igual cuando la preparen para vosotros. Una tarta impresionante que habéis encontrado en Pinterest y que se ha confeccionado para 300 invitados, no lucirá igual si la vuestra va a ser para 50. No será ni mejor ni peor, será diferente. También debéis tener en cuenta que muchas de los pasteles espectaculares que se ven en Internet son de decoración, no se pueden comer.

 

El repostero os debe escuchar, respetar vuestros deseos (mientras no sean imposibles o inadecuados) y aconsejaros de una forma profesional y honesta.  


Pedid siempre que os entreguen un presupuesto por el trabajo, con la descripción de la tarta que habéis encargado. También deben entregaros una factura cuando paguéis el trabajo. Esto último es muy importante por si hubiese algún problema con la tarta.

 

Ajustad el tamaño de la tarta al número de invitados. Parece una obviedad, pero no siempre se calcula correctamente. Y el hecho de que os quedéis cortos es algo mucho peor que el que os excedáis con la cantidad. Las porciones sobrantes se las pueden llevar los invitados, incluso vosotros mismos, pero el que el plato de algunos asistentes se quede vacío puede ser algo imperdonable.  


Se llevan las tartas naked, semi naked o con coberturas ligeras, con frutas y flores, con detalles dorados...


Tarta de boda

 

La estética de la tarta tiene importancia, por supuesto, pero la tiene todavía más su sabor. Si no está rica, por muy bonita que sea, no triunfará. 

 

El sabor o sabores deben gustar a los invitados, desde luego, pero a los que debe agradar sobre todo es a vosotros. Elegid aquellos que os apasionen y os traigan bonitos recuerdos.

 

La estética debe ser coherente con el estilo, la decoración, el lugar y la paleta de colores de la boda. 

 

No todos los ingredientes son adecuados para todas las épocas del año, por lo que es importante que el profesional de repostería os aconseje. Hay coberturas que no resisten bien el calor y la humedad, por ejemplo. 


Tarta nupcial

 

Tened en cuenta las alergias o intolerancias de las que os hayan informado. Podéis prescindir de los ingredientes que no puedan consumir o encargar unas tartas individuales para ellos. 

 

Consultad siempre al profesional acerca de cómo cortar correctamente la tarta. Tanto el primer corte que hagáis vosotros para la foto, como el modo en el que debe hacerlo el servicio de catering. 


¿Habrá tarta nupcial en vuestra boda? ¿Cómo será en caso afirmativo? Sea como sea, espero que vuestra boda sea muy dulce.


 

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15 marzo, 2023

Cómo Elegir el Espacio Perfecto para la Boda

Si hay un asunto especialmente relevante en la organización de la boda, probablemente sea el lugar en el que se celebrará la recepción y la fiesta posterior. Se suele llevar la mayor parte del presupuesto, además de ser lo que más impacto tiene en los invitados. 


Por eso es muy importante elegir el mejor espacio para la boda, algo a lo que espero ayudaros con los consejos que encontraréis en este post. Si todavía no habéis reservado el vuestro os invito a leerlo, porque seguro que os será útil.

 

Cómo elegir el espacio perfecto para la boda

 

El espacio perfecto... ¿existe?


Pues sí y no. Porque lo importante no es que el lugar sea perfecto en sí, sino que lo sea para vosotros. Debe encajar con vuestras necesidades y preferencias, si lo hace casi al 100%, será el ideal.


El planteamiento


Si no tenéis claros los requisitos que convertirán en perfecto un espacio, será difícil que lo podáis encontrar. Desde mi punto de vista las condiciones a tener en cuenta son las siguientes:

 

El presupuesto con el que contáis. Este punto es realmente decisivo, porque las disparidades en cuanto a precio entre unos proveedores y otros son muy grandes. 

 

El número de invitados. Este tema marcará la elección por varios motivos: el espacio que será necesario, los servicios que requerís y el presupuesto que habrá que destinar.

 

El tipo de boda. Debéis decidir si queréis una boda de interior o de exterior, si preferís que sea en un entorno rural o urbano, si os gustaría una boda relajada o muy refinada...

 

Qué celebraréis. Decidid si vais a buscar un único recinto o vais a requerir varios espacios. Quizás únicamente necesitéis un lugar para celebrar la comida o cena, pero también es posible que busquéis un recinto abierto para la ceremonia civil, otro para el cóctel, otro para la recepción y otro para la fiesta. 

 

El estilo. Tanto el vuestro como el que queréis que tenga el evento, tanto en el propio concepto como en la estética. 

 

La fecha. Es importante, puesto que debéis contar con la disponibilidad de los espacios, que en muchos casos es muy limitada, sobre todo si están muy demandados. Lo ideal es que tengáis una fecha principal marcada, pero que tengáis otras como alternativa.

 

La época del año. Según la estación del año habrá espacios más adecuados que otros para celebrar la boda, tanto por el paisaje como por la climatología. 

 

La hora. No es lo mismo una boda de día que una de tarde-noche. El ambiente, la disponibilidad (más habitual que haya fechas disponibles en el caso de las de día) o el precio varían bastante según la hora elegida.  

 

Espacio para bodas

 

Qué tener en cuenta


Más allá de todas las condiciones básicas que os debéis plantear antes siquiera de comenzar a buscar espacio para celebrar vuestra boda, hay otra serie de puntos en que debéis valorar, y mucho, a la hora de escoger uno u otro lugar.

 

Tened siempre presentes vuestras prioridades. Probablemente no haya ningún lugar que cumpla todas vuestras expectativas, pero es conveniente que busquéis el que cumpla las más importantes para vosotros. 

 

Fijaos en la conservación y estado tanto de interiores como de exteriores. Desde la limpieza al aspecto de los jardines.  Tened presente que el espacio que elijáis formará parte de la experiencia de los invitados, por lo que debe ser mucho más que correcto, tiene que ser agradable, proporcionar un servicio impecable, y ser interesante e incluso sorprendente. 

 

Haced una preselección de espacios que visitar, teniendo en cuenta todos los puntos anteriores. Hay tantos entre los que elegir, que es muy fácil perder el norte.

 

Espacio para bodas

 

No visitéis un único lugar, porque conviene elegir con cierta perspectiva. Pero tampoco vayáis a ver demasiados, porque no seréis capaces de escoger. 

 

Buscad opiniones en Internet, pero siendo críticos a la hora de analizar esas valoraciones, puesto que no todos los comentarios son realmente orientativos, ni siquiera legítimos. 

 

Haced caso a vuestro instinto. Escuchad a esa vocecita interior, porque se equivoca menos de lo que parece. La intuición combinada con una mente crítica, observando y prestando atención a los detalles y teniendo en cuenta en su justa medida las opiniones de los demás, suele ser infalible.   

 

Comprobad que detrás del espacio hay una empresa legalmente constituida o un profesional autónomo. Si no es así y surge algún problema, no podréis pedirle responsabilidades a nadie. También es recomendable verificar que las fincas y otros establecimientos no convencionales tienen todos los permisos y licencias para celebrar eventos. 


Lo ideal es que tengan experiencia en eventos, especialmente en bodas. Hay novatos que pueden ofrecer un mejor servicio y atención que otros con mucha experiencia, pero lo cierto que la falta de práctica puede convertirse en un riesgo.

 

Visitad el lugar tantas veces como sea necesario. En una primera visita probablemente no contéis con toda la información ni el criterio necesarios para firmar un contrato. 

 

Valorad tanto el exterior como el interior del recinto. Incluso si toda la boda va a transcurrir en un recinto cerrado, los invitados también harán uso del exterior al llegar y al abandonarlo, así como si salen a tomar el aire, a fumar o los más pequeños a jugar. 

 

Espacio para bodas

 

Fijaos en la conservación y estado tanto de interiores como de exteriores. Desde la limpieza al aspecto de los jardines.  

 

Tened en cuenta cuántos espacios o recintos os ofrece, porque de eso dependerá cómo organizar el evento.

 

Comprobad los accesos, el aparcamiento disponible, así como otros elementos poco bonitos pero muy necesarios, como los aseos. También es importante que valoréis la accesibilidad al recinto en caso de que haya personas con problemas de movilidad entre los invitados. 


Si vais a tener invitados que acudan desde otras ciudades o incluso países, informaos acerca del alojamiento, tanto dentro del propio recinto como en los alrededores.

 

Preguntad por la exclusividad del espacio, porque el hecho de que se celebren varias bodas a la vez o incluso de forma consecutiva (unas de mañana y otras de tarde-noche), puede constituir un problema. Si deben atender varios eventos de forma simultánea, puede que el servicio se resienta o que finalmente os molestéis unos a otros, incluso si pretenderlo. En caso de que haya bodas de día y de tarde-noche, es muy probable que en especial os apremien a los de mañana para desalojar el recinto más rápido de lo que os gustaría para preparar las siguientes. 

 

Pedid toda la información posible, incluso a riesgo de parecer pesados. Todas las parejas tienen muchas dudas a la hora de escoger el espacio para su boda, y la única forma de despejarlas es preguntar, preguntar y preguntar. 

 

Consultad acerca de la posibilidad de personalizar la boda. En una buena parte de los espacios no permiten prácticamente nada que se salga de unos márgenes muy estrechos. Al fin y al cabo llevan a cabo decenas de eventos a lo largo del año, por lo que es más fácil para ellos que sean en serie, sin sorpresas ni cambios.  


Preguntad acerca de las restricciones de cualquier tipo: decoración, animación, exclusividad de proveedores, volumen de la música, horario, etc. 


Informaos acerca del catering: si es propio o deben encargarlo fuera, si permiten que lo contratéis vosotros por vuestra cuenta, si os permiten cambios en el menú, las condiciones de la prueba de los platos, etc. 

 

Espacio para bodas

 

Consultadles si disponen de un plan B, en caso de que surja algún inconveniente, ya sea meteorológico o logístico. 

 

Preguntad cuáles son las partidas incluidas dentro del presupuesto y cuáles serán los cargos extra que pueden surgir. 


Qué exigir, sí o sí


Algo fundamental a la hora de elegir un espacio es que haya una buena conexión con el proveedor. Si no la hay, por excelente que sea el lugar, el evento nunca funcionará.

 

Preguntad todo lo que necesitéis, y reclamad respuestas suficientes y claras. 


Exigid que os escuchen y que tengan en cuenta vuestras opiniones. No consintáis que os traten como a un número, sino como a una pareja que va a celebrar uno de los días más importantes y emotivos de su vida. 


No permitáis que os impongan su criterio, sobre todo si es interesado o no es correcto. Es vuestra boda, no la suya. 


Exigid siempre un presupuesto claro y bien detallado, en el que figuren todas las partidas y las condiciones de la reserva. 


También debéis reclamar la factura o facturas de todos los pagos que hagáis, es su obligación entregarla y vuestro derecho reclamarla. 

 

En cualquier caso, os recomiendo que contratéis a una wedding planner para que os ayude en la organización de vuestra boda, también en el proceso de elección del espacio para su celebración.

 

Espero que estos consejos os ayuden a escoger el lugar perfecto para celebrar vuestra boda.


 

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08 marzo, 2023

Errores A Evitar para que el Banquete de Boda Sea Perfecto

Una de las partidas en las que más dinero vais a invertir en la boda, probablemente la mayor, es la que destinaréis a la comida y la bebida que se servirá en la boda. Y no sólo será la más cara, sino también una de las que mayor impacto tendrá en los invitados. Puede que dediquéis mucho tiempo, trabajo y dinero a la decoración de la boda, o incluso a vuestro vestuario, pero lo que casi con toda seguridad lo que más recordarán los asistentes serán dos cosas: la comida y la fiesta. Y lo harán tanto si el impacto ha sido positivo como negativo. 


Por eso es fundamental acertar con el menú de la boda, desde su elección hasta cómo se sirve o cómo se presenta. Y eso significa no cometer ciertas equivocaciones, que pueden poner en riesgo el éxito de la recepción.


Por eso en este post quiero señalaros algunos de los errores más frecuentes que conviene evitar para que el banquete de vuestra boda sea de "10".

 

Errores a evitar para que el banquete de boda sea perfecto


El presupuesto


No marcarse (y respetar) un presupuesto para la comida y la bebida que se servirá en la recepción de la boda. Aunque siempre conviene contar con un margen de maniobra, por si acaso, porque os aportará seguridad en caso de que queráis algo especial o surja algún coste extra que no estaba previsto.

 

La elección del proveedor

 

No prestarle suficiente atención a la elección del proveedor y del menú, porque ambos van de la mano y deben ser excelentes (que no tienen que se obligatoriamente caros).  

 

La prueba del menú

 

No probar el menú es una grave equivocación, porque guiarse únicamente por el nombre, la descripción de los platos o la foto que os enseñe el comercial del catering es arriesgarse de manera innecesaria.  


Plato con comida gourmet

 

Los invitados

 

No tener en cuenta el número de invitados. Porque no todas las fórmulas son adecuadas para todos los tipos de boda. Una boda con una lista de invitados enorme no encaja muy bien con el buffet o con una recepción completa de tipo cóctel, por ejemplo.  

 

Ser muy optimistas a la hora de calcular el número de invitados y no ser lo suficientemente insistentes a la hora de que confirmen su asistencia. Esto puede llevar a que tengáis que pagar por un número de cubiertos muy superior al de invitados que realmente acudan a la boda.

 

Intentar complacer a todos no funciona nunca, lo único que se consigue con ello es decepcionar a todo el mundo. Componer un menú que sea aplaudido universalmente es algo imposible, así que es posible que a algún invitado no le agrade algún aperitivo o algún plato, y no pasa absolutamente nada. Lo ideal es llegar a un punto medio entre lo que os guste a vosotros y lo que pueda satisfacer a la mayoría de invitados.

 

Las cantidades

 

No servir un cóctel de bienvenida o aperitivos suficientes. Unos buenos bocados antes de la comida o la cena son muy importantes, porque abren el apetito de los invitados, les mitigan el hambre (algo muy importante si ha pasado mucho tiempo entre el final de la ceremonia y la recepción) y pueden salvar los posibles errores del menú principal (retrasos a la hora de servir los platos, calidad deficiente...). Además, si hay poca comida durante el cóctel, es posible que los invitados beban más de la cuenta y/o que les siente peor el alcohol al tener el estómago vacío, y nadie quiere que el banquete de boda comience ya con la mitad de los invitados fuera de combate. 

 

Camarera con una bandeja de canapés en las manos


Además de que los aperitivos deben ser suficientes en cuanto a cantidad, también deben serlos en cuanto a calidad y a capacidad de sorprender a los invitados. Y, por supuesto, deben ser fáciles de comer en uno o dos bocados. 

 

Excederse con los aperitivos del cóctel, si la comida que se sirva a continuación va a ser copiosa, ya que los invitados estarán saciados a la hora de sentarse a la mesa. Ni muchos ni pocos, los justos.

 

También debe ser adecuada la cantidad de comida que se sirva. Los invitados no deben quedarse con hambre, pero tampoco empacharse o que sobren demasiadas viandas.

 

Necesidades especiales

 

No prever un menú infantil adecuado si hay niños invitados a la boda. Los niños no apreciarán un estupendo menú gourmet, sino que prefieren otro tipo de comida, y cualquiera que tenga hijos o sobrinos lo sabe: nuggets y otras carnes empanadas, hamburguesas, hot dogs, pizzas, patatas fritas, croquetas... 

 

No tener en cuenta las posibles alergias. Aunque hay invitados que probablemente os informen de sus alergias, intolerancias y necesidades dietéticas concretas, habrá otros que no, y es importante que los alimentos que sean potencialmente alergénicos estén identificados.

 

Tabla con alimentos

 

El menú

 

No adaptar el menú a la época del año en que se celebra la boda. Comidas muy contundentes, picantes o calientes en los días más tórridos del verano son un fracaso garantizado. Y las ensaladas o sopas frías no serán lo más adecuados en lo más frío del invierno. 

 

Anteponer la estética y la complejidad a la calidad siempre es una mala elección. Es mejor optar por buenas materias primas y bien cocinadas, que por platos complicadísimos en los que es difícil adivinar cuáles son los ingredientes principales. 


Tartas de boda

 

No optar por alimentos de temporada siempre es un error. El menú será más caro y la calidad de los ingredientes no será la óptima. Cuando un alimento es de temporada y de proximidad, estará en su mejor momento. Si debe recorrer miles de kilómetros para terminar en el plato de los invitados nunca podrá estar tan en su punto. Pensad que nunca se recogen en su momento óptimo, se conservan (e incluso se maduran) en cámaras, deben transportarse con lo que ello conlleva, pasan muchos días entre la cosecha y la cocina...

 

Repetir ingredientes. Servir el mismo alimento en el cóctel, en el entrante y en uno de los platos del banquete es un error, por muy bueno que sea. Un canapé de jamón ibérico en el cóctel, una crema de puerros con virutas de jamón como entrante y unos champiñones con jamón ibérico como guarnición del plato de carne es demasiado jamón, por muy ibérico que sea. 

 

Escoger alimentos difíciles de comer o que manchen mucho cuando se consumen es una equivocación por motivos obvios. 


Arroz negro

Ofrecer marisco difícil de comer puede ser un error. Si bien es un tipo de alimentos que suelen tener una legión de rendidos admiradores, lo cierto es que puede poner en un aprieto a más de un invitado. Por no hablar de que es fácil terminar con alguna mancha si no se es muy hábil a la hora de consumir cierto tipo de marisco. 

 

Hay ciertos alimentos que no deberían servirse en crudo, como las carnes y los pescados. Por una parte, no agradarán a todos los asistentes, y por otra pueden ser un problema de seguridad alimentaria si no se han seguido todas las medidas necesarias, tanto en origen, como en su manipulación y transporte (si se trata de un catering externo). 

 

Si ofrecéis carne, es importante que los cortes sean de cierta calidad, porque los que no son tan buenos requieren mucha maestría para convertirse en un buen plato.

 

Excederse con el picante puede ser muy mala idea. No todo el mundo tiene una alta tolerancia a los alimentos picantes, de hecho, hay personas que sufren muchísimo con ellos. Es mejor ser conservador con este punto. 

 

El servicio

 

No dejar claro al catering cómo deseáis el servicio. Es importante que no tarden demasiado a la hora de servir cada plato, que no lo retiren demasiado pronto, que los invitados estén servidos al mismo tiempo en la medida de lo posible...

 

Invitados sentados a la mesa de la boda

 

Las comidas y cenas interminables. Los invitados quieren disfrutar de la comida, no sufrirla. El hecho de estar sentados 3 ó 4 horas (o más), puede llegar a ser un suplicio para cualquiera. Y además de que es incómodo, debéis tener en cuenta que los invitados también quieren levantarse, bailar e interactuar entre ellos.

 

Y algún consejo extra para vosotros...

 

Perderse el cóctel es una falta de respeto hacia los invitados. Esto suele ocurrir porque la sesión fotográfica se eterniza, pero se soluciona con una buena planificación y coordinación con el equipo de fotógrafos. Los asistentes estarán deseando veros y charlar con vosotros, y el cóctel es el momento ideal, porque luego os sentaréis todos en vuestras mesas y ya no podrán hacerlo hasta la fiesta. 

 

Llegar tarde a la comida o la cena. Si perderse el cóctel es una mala idea, retrasarse a la hora de entrar a la recepción todavía lo es más. Los invitados estarán deseando sentarse para comer y el personal de cocina y servicio de ponerse a trabajar. Pensad que eso causará problemas en la cocina y la calidad del menú probablemente se resentirá. Y los camareros, que suelen estar contratados por horas, tendrán que alargar innecesariamente su jornada de trabajo. Por no mencionar que si se trata de una boda de mañana y por la tarde-noche hay otra programada, causará retrasos a la hora de finalizar vuestro servicio y preparar el siguiente. 


Con estos consejos seguro que vuestros invitados recordarán con admiración y durante mucho tiempo vuestro banquete de boda.



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01 marzo, 2023

Banda en Vivo o DJ: Pros y Contras de Ambas Opciones

¿Ya habéis elegido qué música sonará en la fiesta de vuestra boda? Y no me refiero a la playlist, a los temas imprescindibles o a los que tenéis totalmente vetados, no, sino a quién pondrá la banda sonora a vuestra boda.


Aunque hasta hace poco casi se daba por hecho que la música estaría a cargo de un DJ, lo cierto es que hay una tendencia en auge: las bandas o grupos musicales en directo. 


Si no sabéis cuál de las dos opciones elegir, en este post quiero comentaros cuáles son los pros y contras de una banda en vivo o de un DJ en la fiesta de vuestra boda.

 

Banda en vivo o DJ: pros y contras de ambas opciones
 

 

 Música en vivo


Pros


Os ayudarán a crear un ambiente específico según la formación o banda que elijáis. 

 

Una banda en directo puede ofrecer una experiencia única, puesto que su música cuenta con el factor humano, y no hay ninguna actuación igual que otra, ni se crea la misma conexión entre músicos e invitados.

 

Los invitados se sienten más motivados y participativos durante la fiesta si hay alguien tocando o cantando en directo.

 

Incluso los invitados que no bailan disfrutarán de una buena actuación en directo.

 

El mero hecho de ver tocar y cantar a un grupo musical tiene algo de hipnótico, de espectáculo visual.

 

Si además de tocar y cantar bien, son buenos animadores, tendréis un éxito doble. 

 

Si la formación es numerosa y hay más de un espacio, se pueden dividir para amenizar más de una localización. 


Banda tocando música

 

Contras

 

Una formación musical suele ser más costosa que la intervención de un DJ. Aunque obviamente el importe tendrá una relación directa con la calidad y experiencia de los profesionales, su número y el tiempo contratado.  

 

La mayoría de las bandas tienen un estilo definido, incluso aunque interpreten temas que se salgan de su sonido específico.

 

Una banda o un grupo de música clásica necesita un espacio suficiente, que dependerá de su número, de los instrumentos y de las necesidades de sonorización, que siempre será mayor que el que requiere un DJ.

 

El repertorio puede ser limitado, puesto que es imposible que un grupo tenga preparadas todas las canciones imaginables. 

 

Requieren descansos, que serán más o menos numerosos según la duración de la fiesta. Eso significa que durante esos momentos tendréis que tener prevista música grabada para que los invitados puedan seguir bailando. 

 

Micrófono en primer plano y músico con guitarra


DJ 


Pros

 

Puede reproducir todo tipo de temas, puesto que no está limitado al repertorio que conozca y se haya preparado como en el caso de los músicos.

 

Si sois muy puntillosos en lo que respecta a la música que queréis que suene en la boda, el DJ os proporcionará un mayor control creativo.

 

Necesita un espacio menor que en el caso de un grupo de músicos, y también un equipamiento y montaje más sencillo. 

 

La música nunca se interrumpirá, porque durante sus descansos dejará que suene una lista de reproducción para mantener a los invitados bailando.

 

Si es un buen profesional, mantendrá la pista llena todo el tiempo, puesto que irá adaptando los temas según vaya evolucionando la fiesta. 

 

El más fácil controlar el volumen de la música, algo especialmente importante si hay algún tipo de restricciones al respecto en el lugar en el que celebréis la boda. 

 

La mayoría de ellos lleva iluminación y efectos especiales para crear el perfecto ambiente de fiesta.

 

Suelen llevar un micrófono, lo que facilita que pueda animar a los invitados, hacer anuncios o facilitárselo a algún invitado que quiera participar.


Mesa de DJ con fiesta de boda en segundo plano


Contras

 

Es importante contratar a un buen profesional, porque si es mediocre o malo, puede estropear la fiesta desde el primer minuto. Si los temas son aburridos, funciona con una playlist estandarizada o no es capaz de conectar con los invitados, la pista se vaciará rápidamente.

 

Es un espectáculo de una única persona, por lo que puede resultar menos entretenido que un grupo en vivo. 

 

Si el DJ se desconcentra y comienza a funcionar con el piloto automático, puede que terminen sonando temas que no queréis.

 

En caso de que no lleve una cabina en el que se puedan esconder los cables con alguna cubierta, estarán todos a la vista, lo que no es muy estético.  

 

Si su equipo falla, se acabará la fiesta, puesto que no podrá cantar o tocar un instrumento para seguir amenizando el baile. 


Qué tener en cuenta a la hora de decidir entre una banda o un DJ


♥  El presupuesto disponible.

 

El espacio disponible para ubicar al grupo o al DJ.

 

Si la boda será en interior o en exterior.

 

Las restricciones en cuanto a ruido, horario y condiciones.

 

El estilo de la boda. 

 

El tipo de música que queréis que amenice vuestra fiesta.

 

El número, estilo y edades de los invitados.

 

Instrumentos musicales de una banda

 

Algunos consejos importantes

 

Elegid siempre a profesionales con buenas referencias.  

 

Es importante que el grupo o el DJ sean lo suficientemente flexibles para poder agradar a la mayor parte de los invitados. 

 

Especificad si queréis que animen o no la actuación con chistes, con comentarios, si atenderán peticiones o no, si permitirán que los invitados intervengan de algún modo, etc.

 

Procurad ver una actuación de la banda o el DJ en directo. Si no es posible, al menos pedid que os envíen grabaciones de sus intervenciones.

 

Exigid un contrato de prestación de servicios, en el que se detallen todas las condiciones de su actuación.


¿Quién se encargará de la música en la fiesta de vuestra boda, una banda en vivo o un DJ? ¿O quizás ambos? ¿Ya lo habéis decidido?



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La primera vez que apareció el post Banda en Vivo o DJ: Pros y Contras de Ambas Opciones fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?


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