29 agosto, 2018

Lo que Sí y lo que No Consentir a los Invitados

Una de mis recomendaciones más recurrentes a las parejas a las que ayudo a organizar su boda es que mimen a sus invitados. Al fin y al cabo cuando se invita a alguien a cualquier tipo de evento, es imprescindible mostrarle hospitalidad, respeto y cariño. Si no va a ser así, es mejor no invitarle.


Pero una cosas es mimar a los asistentes a la boda y otra muy diferente es consentirles cualquier cosa. Porque lo mismo que vosotros debéis mostrar respeto y cariño hacia los invitados, ellos deben corresponderos de igual manera. Al fin y al cabo los anfitriones y los que os casáis sois vosotros, y lo merecéis.


Hay determinados comportamientos y actitudes que son realmente inapropiados y que, en mi opinión, nunca deberán consentirse a los invitados. En caso de que ocurran, lo ideal es que no seáis vosotros quienes os encarguéis de solucionar el problema, sino que designéis a una o varias personas que solventen la situación.


Desde mi experiencia y criterio creo que hay actitudes y peticiones que son inadmisibles, otras en las que podéis ser más flexibles y otras que respetar siempre. Si queréis saber cuáles son, os invito a que sigáis leyendo...


Lo que sí y lo que no consentir a los invitados


Lo que no deberías consentir 


Aunque a vosotros y a mí nos gustaría que no ocurriese nunca, lo cierto es que hay invitados que pretenden determinadas cosas que son inadmisibles. Como recomendación general, lo ideal es que si se llegan a dar sea vuestra wedding planner o en su defecto el maître o el coordinador del lugar en el que celebréis la boda, puesto que son neutrales; es decir, no son familia ni amigos que puedan verse comprometidos si tienen que recriminar su actitud a algún invitado. En caso de que no podáis recurrir a nadie externo, os recomiendo que le encarguéis la tarea a alguien cercano que pueda gestionar bien este tipo de situaciones, por su carácter y sus habilidades. 


Algunas de estos comportamientos y actitudes inaceptables son:


Sorpresas e intervenciones inapropiadas


Hay invitados que deciden por su cuenta y riesgo dar su propio discurso durante la ceremonia sin que se les haya invitado a ello. Esto es un problema, puesto que puede desbaratar la programación y el guion previsto, por no hablar de que según el invitado y su estado (etílico o psicológico), puede crear una situación desagradable con sus palabras. Esto también se puede hacer extensivo a los brindis durante la recepción.


Por otra parte, las sorpresas consistentes en bailes, canciones, vídeos y otras actividades, pueden convertirse en un problema para el desarrollo de la boda. Si los invitados con ganas de sorprender no cuentan con la persona que se encargue de organizar y coordinar la boda, puede ser una verdadera contrariedad. Si lo llevan a cabo durante la ceremonia, pueden ralentizarla o deslucirla al romper el ritmo y el estilo con los que se ha diseñado. Si lo hacen durante el cóctel o la recepción y sin contar con la organización de la boda, pueden molestar a los camareros, retrasar la salida de los platos, etc. Y si se hace durante la fiesta, pueden estropear el baile nupcial u otras sorpresas que los novios tengan previstas para sus invitados. Un desastre, para decirlo en dos palabras.


Si los invitados desean sorprender a sus invitados, lo adecuado es comentárselo a la wedding planner, al coordinador del lugar de celebración o en su defecto a un familiar o amigo cercano a los novios. 


Brindis de los invitados


Discusiones


Las discusiones y altercados son inadmisibles. Una forma de que no sucedan es evitarlas desde el principio. Esto se consigue procurando no invitar a personas que tengan enemistad manifiesta o que preveáis que van a provocar problemas con casi toda seguridad.


También es importante cuidar el consumo del alcohol, que suele ser fuente de problemas. Esto se logra ofreciendo bebidas de calidad y también opciones sin alcohol suficientemente atractivas, para que los invitados puedan alternar bebidas con y sin. Algunas de estas alternativas no alcohólicas son las aguas aromatizadas con frutas o hierbas aromáticas, aguas con gas y sabores, los cócteles sin alcohol, los zumos o batidos naturales...


En caso de que las discusiones surjan no debéis hacerles caso y dejar que otras personas las que se encarguen, preferentemente ajenas a la familia o amigos para que medien y, en el peor de los casos, para que desalojen a las quienes sean los responsables del altercado; aunque esa debería ser la última opción. Vosotros únicamente debéis dedicaros a disfrutar.


Pareja de novios


Faltas de respeto hacia vosotros o hacia el resto de los invitados


Los comentarios desagradables, las críticas desabridas y los insultos velados (o explícitos) no se deben consentir en una boda. En caso de que ocurran, lo recomendable es no prestarles atención como primera medida. Si continúan, lo mejor es que personas cercanas se encarguen de recriminárselo de una forma delicada pero firme a quien esté comportándose de forma inapropiada, recordándole que no es ni el lugar ni el momento para ese comportamiento


Cambios de mesa


Si os habéis preocupado de organizar el seating de la boda, con el tiempo y el esfuerzo que conlleva, ningún invitado puede hacer caso omiso y pretender sentarse en otra mesa diferente a la que se habéis asignado, porque sea más de su agrado. Y tampoco se puede admitir que pida que monten otra mesa para que se sienten a ella las personas que ellos quieran, puesto que eso implica un trabajo extra para los trabajadores del lugar en el que se celebra la recepción, que puede suponer retrasos y dificultades para la programación del servicio... o incluso un coste añadido.


Si ocurre esto, bien la wedding planner o el maître, respondiendo a vuestros deseos, le deberían pedir amablemente a ese invitado que se siente en el lugar asignado, explicándole que la organización está diseñada al milímetro y que cualquier modificación puede echarla a perder. 


Mesa de boda


Cosas en las que ser flexible


Hay situaciones delicadas y potencialmente molestas que, según vuestro criterio y las circunstancias específicas, pueden invitaros tanto a ceder como a ser inflexibles. A continuación os enumero algunos ejemplos de estas tesituras incómodas:


Invitados que se presentan con niños cuando habéis avisado que es una boda para adultos


Hay casos en los que, aunque la invitación únicamente esté dirigida a los padres, sin incluir a los niños ni se incluye la expresión "y familia" tras sus nombres, o que hayáis expresado por activa y por pasiva que la boda es para adultos, hay parejas que se presentan con los niños sin avisar. Sin entrar en si tienen razón o no la tienen, lo cierto es que no respetar los deseos de los novios es una falta de respeto hacia ellos... y un problema organizativo.


Esta situación es un clásico en las bodas, ante la que, además de tolerarlo sin más, tenéis otras dos opciones: mostraros firmes o ser más flexibles. En el primer caso, tendréis que pedirle (a través de un intermediario, claro) a la persona o la pareja que se ha presentado con niños contrariando vuestros deseos, que deje a los pequeños en casa y luego vuelva, si lo desea. Es una elección muy dura y que tendrá consecuencias serias, porque las personas afectadas probablemente os retiren la palabra, lo mismo que la familia y amigos de esos padres y otros invitados que se posicionen a su favor. Esto se puede hacer con compromisos o personas con las que se tiene poca relación, pero con familia y amigos íntimos... se puede convertir en un campo minado.


La otra opción es permitir que los niños se queden, y recriminarles su falta de respeto más adelante. En cualquier caso, los pequeños invitados inesperados van a suponer un quebradero de cabeza, porque hay que prepararles un sitio en la mesa y también buscarles un menú adecuado para ellos, que no siempre es fácil si no estaba previsto. 


Niña vestida para una boda sentada en un puente

 
Invitados adicionales e inesperados


A los invitados que primero declinan la invitación y luego aparecen el día de la boda como si tal cosa y a los que han sido invitados a título individual y se presentan con una pareja o con un amigo, se les aplica lo mismo que a los padres que aparecen con sus niños cuando se trata de una boda para adultos.


Que usen los móviles si  habéis pedido expresamente que no se utilicen durante la ceremonia


Es otro punto en el podéis ser flexibles, o no. Mi recomendación es que les comuniquéis vuestros deseos a os invitados de forma clara. Podéis hacerlo en persona, a través de amigos o familia que hagan de intermediarios, ponerlo en las propias invitaciones, mediante un correo o un WhatsApp, dejándolo caer en las redes sociales... incluso podéis poner unas cestitas a la entrada al lugar de celebración de la ceremonia con un cartel que diga algo como "deja aquí tu móvil y disfruta de nuestro sí, quiero" o "por favor, no sigas la ceremonia a través de un objetivo, te perderás muchas cosas".


En caso de que no queráis ser flexibles, podéis designar a algunas personas para que pidan amablemente a los invitados que dejen sus teléfonos.


En cualquier caso, una boda sin móviles es algo difícil de conseguir


Invitada con un móvil


Peticiones de canciones


Hay cada vez más parejas que no desean que los invitados pidan canciones a los DJ's, porque quieren que los únicos temas que suenen sean los que han elegido ellos, o que no desean que se pongan determinadas canciones que no les agradan.


Si no queréis peticiones espontáneas, lo mejor es comunicárselo al DJ y que sea él el que se encargue de desactivar a los invitados pedigüeños. 


Que haya invitados empeñados en llevarse los centros de mesa


Es algo hortera, viejuno, miserable, innecesario... pero que sigue ocurriendo en muchas bodas, incluso en las más millennials y cool, porque los invitados, como los caramelos de Harry Potter, los hay de todos los colores y sabores.


Si en vuestro caso los centros son alquilados, bien por parte del espacio de celebración o de una floristería, si se los llevan, os los van a cobrar, así que es importante que lo evitéis. Podéis pedir que los camareros o el maître se encarguen de impedirlo, o también vuestra organizadora de bodas y su personal.


Otra opción es que los camareros recojan los centros y los lleven como adorno para las mesas en las que tenga lugar la fiesta. Aunque parezca mentira, a estos invitados robaflores les atrae menos llevárselos de la zona del baile que de la de la recepción. 


Si los centros están dentro del precio que os cobren y el que se los lleven no os va suponer un gasto extra, podéis ser más flexibles y permitirles que se los lleven. Eso sí, os recomiendo que el fotógrafo les tome alguna foto antes de que comience la recepción y que alguna persona de vuestra confianza recoja alguno para vosotros antes de que comience la fiesta si es que queréis conservarlo. 

 
Decoración floral de mesa de boda


Que no se respete el dress code


Si habéis pedido un código de vestuario expresamente en las invitaciones, puede que haya invitados que no lo respeten. Incluso puede que algunos no respeten las normas mínimas de etiqueta, como llevar un vestido blanco en el caso de las mujeres, lucir chaqué sin ser el novio ni el padrino o llevar vaqueros y camiseta en una boda formal.


Si esto ocurre y dependiendo de la gravedad y la intención de esta falta de respeto del dress code, sois vosotros los que debéis valorar si ser flexibles y no darle importancia o pedirle (con educación y respeto) al invitado que se vuelva a su casa a cambiarse. Si optáis por lo segundo, lo recomendable es que lo haga una persona de vuestra confianza, no vosotros mismos. 


Invitada de boda


Lo que sí es conveniente consentir siempre


Hay circunstancias concretas en las que, desde mi punto de vista y mi experiencia, debéis ceder sin duda alguna. 


Las dietas y necesidades especiales


Si hay invitados que necesitan un menú sin sal, sin gluten o sin algún ingrediente al que serán alérgicos, hay que respetarlo y pedirle al proveedor de gastronomía que lo tenga en cuenta. Incluso si hay vegetarianos o veganos.


Eso sí, es imprescindible que los asistentes lo comuniquen con tiempo para que vosotros podáis pedir un menú específico para ellos


Facilidades para las personas con problemas de movilidad


Si hay invitados que tengan dificultades para moverse, vayan en silla de ruedas o con carritos de bebés, hay que pedirle al responsable del espacio (tanto de la ceremonia como del banquete) que les facilite la entrada y el desplazamiento por las zonas comunes, así como el acceso y uso de los aseos.


Espacio para niños y bebés


Si los niños son bienvenidos en vuestra boda, lo lógico es prever zonas en las que ellos puedan estar cómodos y jugar sin molestar al resto de asistentes. También es conveniente avisarlo a los responsables del espacio para que preparen tronas para los más chiquitines.


Lo mejor, contar con un animador o cuidador que se encargue de entretener y cuidar a los peques.


En el caso de los bebés, lo ideal es comprobar que pueden facilitar una zona para cambiar pañales y para que las madres que lo deseen puedan utilizarlo para lactancia. También es oportuno consultar a la cocina si hay la posibilidad de calentar biberones o comidas infantiles.


Bebé vestida para boda


Zona de fumadores

Aunque no está permitido fumar en los espacios interiores, por supuesto, es importante que haya zonas exteriores y de fácil acceso para que los invitados que lo deseen puedan hacerlo. Si no hay habilitada este tipo de espacio, lo único a lo que os arriesgáis es a que los invitados terminen fumando en los baños o en zonas no permitidas, lo que os puede traer problemas con los responsables del espacio y con los asistentes que no fumen.


Mis consejos: comprobar que la zona habilitada no incumple la normativa y no molestará a los invitados no fumadores, señalizar correctamente el acceso a estas zonas, asegurarse que haya ceniceros suficientes. Un plus interesante es colocar justo en la puerta de acceso a esa zona de fumadoras un cigar bar.


¿Qué opinas de estos síes y noes a los comportamientos y necesidades de los invitados?




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22 agosto, 2018

Kit de Supervivencia para Invitadas

¿Estás invitada a una boda? Pues entonces este post es para ti, porque en él quiero darte las claves para conseguir el mejor kit de emergencia para invitadas de todos. Porque se habla mucho del kit de supervivencia o o emergencia para las novias, pero... ¿y qué pasa con las demás?


Cualquier invitada pasa tiempo eligiendo su outfit, maquillándose y peinándose. Las bodas, en general, duran varias horas. Y para más inri, se suelen celebrar en lugares apartados, en los que es difícil encontrar una perfumería, una mercería o una farmacia. Eso implica que las asistentes a la boda deben llevar sus propios recursos encima para retocarse o solucionar imprevistos. Y eso se consigue con un buen kit de supervivencia para invitadas.


Y en este post no te voy a contar cómo prepara uno de estos kits, sino dos. Uno más sencillo, para llevar en el bolso, y otro más completo para llevar en el maletero del coche, sólo apto para las más prevenidas.


Venga, toma nota que aquí están estos kits...


Kit de supervivencia para invitadas


Para poner en el bolso


Te recomiendo que incluya:


Pañuelos de papel

Por si lloras, por si tu linda naricita te juega una mala pasada, por si tienes que limpiar alguna mancha, para secar tu cabello si se moja y no quieres que se encrespe o que pierda demasiado su forma... No hace falta que lleves el paquete entero, con que pongas dos o tres en tu bolso es suficiente.


Tiritas

No abultan nada, de hecho las puedes llevar en la cartera y te salvarán en caso de que el calzado te roce o tengas algún percance. Incluso pueden servirte para ponerlas detrás de tus orejas, al igual que el esparadrapo, si los pendientes son grandes y pesados y comienzan a hacerte daño.


Un pedacito de cinta de doble cara

Tampoco ocupa espacio y puede ser de lo más útil si el escote se te ahueca o se te rompe un dobladillo. Hace milagros. 


Un mini costurero

De los que suelen dar en muchos hoteles, esos que llevan unas cuantas hebras de colores, una aguja y un botón pequeño. En este caso te aconsejo que incluyas las hebras de hilo de los mismos colores de tu vestido.


Dos imperdibles

Uno grande y uno pequeño. Con ellos podrás sujetar el bajo de tu vestido si es largo y no te permite bailar o si tienes algún percance con la ropa.


Horquillas /goma del pelo

Si llevas un recogido, unas pocas horquillas, de las mismas que te han puesto en la peluquería, te servirán si es necesario reforzar o retocar el peinado. En caso de que luzcas el pelo suelto, una goma elástica te será de lo más útil si a la hora del baile quieres retirarte la melena para estar más cómoda. Eso sí, asegúrate de que sabes cómo retocar el peinado o cómo recoger el cabello con cierto estilo; si es necesario, consulta a tu peluquera para que te diga cómo hacerlo. 


Un peine

Algo que no debería faltar en ningún bolso, tanto si es de diario como si es de fiesta. Nunca sabes cuándo te va a hacer falta. 


Un espejo

Puede ser uno pequeño de bolsillo, o emplear el que lleve la polvera o el estuche de maquillaje que metas en el bolso para retocarte. Lo ideal es no duplicarlo, así que si llevas un estuche con espejo, no incluyas otro de bolsillo, así podrás hacer sitio para más cosas en tu carterita de fiesta.


Polvera con espejo


Una lima

No hace falta que lleves una grande, de la que usas para la manicura en casa. En muchos costureros de viaje, se incluyen pequeñas limas, con una de ellas será suficiente para retocarte una uña si se te rompe o se astilla. También puedes llevar una de esas pequeñitas que tienen algunos estuches publicitarios o de cortesía que dan en algunos establecimientos. 


Toallitas matificantes / polvos compactos

Imprescindibles para retocar el maquillaje y eliminar esos brillos impertinentes que arruinan cualquier look de invitada.


Labial

Lleva el mismo labial con el que hayas maquillado para retocarte cuando sea necesario. Un detalle: cuando te pintes los labios, no lo hagas en la mesa de la recepción y ve al baño, es más elegante hacerlo así.  


Kit de supervivencia para invitadas
Como puedes ver, preparar un kit de supervivencia para invitada que queda en la cartera es posible


Crema de manos

Pon en el bolso un tamaño mini de crema de manos, o rellena un envase de muestra de crema facial con tu producto favorito. No sólo te servirá para eliminar la sequedad de tus manos, también te servirá para nutrir las puntas de tu cabello si está muy reseco por la laca, si tienes pelitos que se quedan encrespados o para aplicar en los talones o los dedos de los pies si prevés que te van a producir rozaduras. Incluso te servirá para darte un toque en los labios antes de pintártelos y evitar los pellejitos y la sequedad.


Un par de bastoncillos para los oídos

Moja un parte de bastoncillos de los oídos en tónico, agua de belleza o un producto similar y guárdalos en una bolsa pequeña y hermética, o envuélvelos en papel de aluminio y ponlos en tu cartera. Si necesitas corregir el rímel que se haya derretido o algún desperfecto en tu maquillaje, lo podrás hacer en un momento y de forma limpia.


Perfume

Por si quieres perfumarte de nuevo. Lo ideal es llevar un perfumador mini (de los de muestra) en el bolso, si no lo tienes, para no cargar con un frasco grande y ahorrar espacio, puedes llevar una muestra o utilizar una de esas almohadillas perfumadas promocionales que suelen ir en algunas revistas femeninas. También puedes rellenar un vial de los de muestra con tu perfume favorito si el envase es de los que permiten abrirlo sin problemas, que ya sabes que algunos vaporizadores no se pueden abrir si no es con unos alicates y mucha maña.


Perfume


Para las más previsoras


Al kit básico para el bolso le puedes añadir varios artículos que pueden serte útiles. Eso sí, esto únicamente podrás llevarlo a la boda si vas en coche y puedes dejar la bolsa en la que lo lleves en el maletero.


Aquí tienes ideas para este kit más completo:


Toallitas húmedas

Por si necesitas refrescarte o quitar alguna mancha leve.


Desodorante

En caso de que quieras reforzar el trabajo de las toallitas húmedas para seguir fresca y limpia toda la noche.


Compresas / tampones

Por si acaso...


Cepillo de dientes + pasta

Puedes incluir un kit de cepillado de dientes, por si quieres refrescar tu aliento tras la comida. Pero recuerda que para proteger el esmalte de tus dientes debes dejar pasar al menos 20-30 minutos desde que hayas comido o bebido hasta que te cepilles. Si quieres una solución más sencilla, puedes recurrir a los chicles o los caramelos de menta. 


Neceser de maquillaje completo

Por si necesitas algo más que un retoque, puedes llevar los mismos productos con los que te has maquillado al comienzo del evento.


Neceser con artículos de maquillaje


Laca y otros productos de styling

Por si tu cabello necesita una revisión más intensa que poner unas cuantas horquillas o recoger el pelo con una goma elástica.


Un vestido de recambio

Por si te lo manchas, por si no estás cómoda o por si te quieres cambiar de outfit por cualquier motivo, como por ejemplo que la fiesta siga en un ambiente menos formal. En líneas generales no te lo recomiendo, porque puede resultar algo esnob y un engorro más, pero puede salvarte de más de un imprevisto.


Una prenda de abrigo

Por si refresca durante la noche.


Zapatos de repuesto

Aunque en muchas bodas suelen regalar bailarinas, chanclas o alpargatas, no está de más llevar un par cómodo en el maletero del coche. Así te asegurarás de que ese segundo calzado sea de tu número, cómodo y que encaja con el resto de tu look, porque los de regalo puede que no cumplan ninguno de esos requisitos. 


Zapatos cómodos en color rosa y dorado


Un abanico

En verano es de lo más recomendable. Aunque hay novios que ponen abanicos a disposición de sus invitados, no siempre es así, y un abanico siempre es útil cuando hace calor, sobre todo durante la ceremonia y el baile.


Analgésicos

Por si un dolor inoportuno amenaza con estropearte la fiesta. Pero, cuidado con ellos, si te has tomado una copa, porque pueden no ser recomendables para tu salud.


¿Echas de menos algún artículo que incluirías en estos kits? ¿Eres de las confiadas o de las más previsoras?




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15 agosto, 2018

Autocares para los invitados: Ventajas e Inconvenientes

¿Estáis pensando en poner un autocar a disposición de vuestros invitados? Si es así, en este post me gustaría comentaros cuáles son los inconvenientes y ventajas de este tipo de servicios, tanto para vosotros como para los asistentes a la boda. De ese modo, podréis decidir teniendo toda la información necesaria.


¿Nos ponemos en marcha? 


Autocares para los invitados: ventajas e inconvenientes


Inconvenientes


Uno de los principales inconvenientes de contratar uno o varios autocares es el precio, especialmente si el número de invitados es elevado y hay que alquilar más de uno.


Es fundamental buscar una empresa de alquiler de autocares solvente, segura y con experiencia. En este caso, no os recomiendo el low cost, porque lo que está en juego es la seguridad de los asistentes.


No a todos los invitados les gusta éste tipo de transportes colectivos y prefieren llevar su vehículo particular.


En muchos casos, es imposible recoger y dejar a todos los asistentes a la boda en la puerta de su casa, por lo que hay que utilizar puntos de encuentro y llegada, a partir de los cuales al final tendrán que tomar su coche, un taxi o VTC o transporte público. Lo que no termina de solucionar el problema de los traslados a los invitados.


Autobus vintage para boda


Es fundamental organizar los puntos de recogida y llegada, los trayectos y los horarios al milímetro para que todo funcione a la perfección. Esto hay que coordinarlo de forma impecable con la empresa de alquiler de autocares.


Es importante buscar un lugar habilitado para que el autocar pueda dejar a los invitados en la ceremonia y la recepción con seguridad, comodidad y sin cometer ninguna infracción de tráfico.


A toda la vorágine que implica la organización de la boda, se le añade el trabajo de preparar una lista con los invitados que tomarán el autocar, que debería estar compuesta de los nombres de cada uno y su teléfono.


Hay que contar con una persona que se encargue de comprobar que todos los asistentes de la lista han subido al autocar antes de partir. Esto supone una responsabilidad y un trabajo para esa persona, porque siempre hay retrasos, los tardones no responden al teléfono, el chófer se impaciente, la hora de la boda se acerca...


En muchos casos, los invitados pasan mucho tiempo en el autocar si hay invitados rezagados o si hay varios puntos de recogida o llegada, y eso puede llegar a ser incómodo.


El tráfico y sus imponderables pueden provocar retrasos en la llegada de los invitados, lo que puede suponer un verdadero inconveniente en el momento de la ceremonia.


Es imprescindible concertar al menos dos horas de salida para que los invitados que deseen finalizar la recepción pronto puedan hacerlo sin problemas, y que los más fiesteros puedan aprovechar hasta el final. Esto supone un plus de organización y en muchos casos un coste extra. 


Pequeño autocar rosa decorado


Ventajas


Es una manera de mimar a los invitados, un gesto de cortesía más.


Es una forma de que los asistentes ahorren tiempo, paciencia, combustible, incluso en aparcamiento.


Os podréis ahorrar los planos de localización en las invitaciones, puesto que únicamente tendéis que facilitárselo a los que vayan a llevar su coche privado, y eso podéis hacerlo por correo o WhatsApp.


Os evitaréis las llamadas inoportunas de invitados que se pierden y no se les ocurre otra cosa que llamar al novio o a la novia para que les indiquen el camino, que pasa, doy fe.


Parte trasera de un autocar de estilo vintage


Los invitados pueden interaccionar entre sí antes de que comience la boda, lo que suele crear un ambiente más distendido y alegre desde el principio. Esto es ideal si hay asistentes que proceden de distintos círculos y tienen edades muy dispares.


Es una forma de que la mayoría de los invitados lleguen al mismo tiempo al lugar de celebración de la ceremonia o de la recepción.


Aunque se les entregue un plano, lo cierto es que los asistentes suelen tener problemas para encontrar el camino al lugar de celebración de la ceremonia y la recepción, sobre todo si ambos están muy alejados o si los invitados son de fuera, por lo que llevarles en autocar facilita mucho las cosas.


Al finalizar la boda no tendrán que conducir cansados y quizás con algún combinado de más.


¿Vosotros qué opináis? ¿Alquilaréis autocares en vuestra boda? Personalmente, no me gusta demasiado la solución de los autocares, quizás por mi experiencia como wedding planner sé la cantidad de imponderables y sorpresas que implica este tipo de servicios, aunque reconozco que en determinados casos es casi imprescindible.




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08 agosto, 2018

¿Qué Hacer Si Algún Invitado No Regala Nada?

Hay cosas que se dan por hecho en los invitados de boda: confirmarán su asistencia, se pondrán sus mejores galas, no irán vestidos de blanco (si no se lo piden expresamente), apagarán su móvil durante la ceremonia, felicitarán a los novios y les agradecerán haber compartido con ellos un momento tan especial... y harán un regalo a la pareja.  Aunque la realidad es que muchos asistentes no respetan estas normas de etiqueta bodil, incluso la de entregar un regalo a los novios.


Evidentemente, lo adecuado es hacer un regalo en una ocasión como esa, incluso si se invita a alguien y no puede asistir. No con la voluntad de pagar el cubierto, desde luego, sino de corresponder al detalle que tienen los novios al hacer la invitación y compartir con ese invitado algo tan importante para ellos.


Las normas de etiqueta dicen que lo mejor es entregar el regalo de boda antes de que ésta tenga lugar, en lugar de después. De hecho, hacerlo antes es una forma de mostrar que el obsequio no se hace en función de la calidad y cantidad de la comida y la bebida o de la categoría del espacio en que ha tenido lugar. 


Es lo que se espera, pero... ¿y si ese regalo no llega nunca? ¿Qué hacer? ¿Cómo reaccionar con estilo?


Si queréis saber cómo responder ante un invitado tacaño o despistado que olvida el regalo de boda, no os perdáis las ideas que os doy a continuación...


¿Qué hacer si algún invitado no regala nada?


No deberíais decir nada, porque hacerlo es algo realmente grosero. Aunque es lo que se espera en estos casos, nadie está obligado (aunque sí se debe, por supuesto) a regalar nada en una boda, aunque le inviten, por lo que recordarle que todavía no os ha entregado ningún regalo o no os ha hecho ningún ingreso en la cuenta os hace quedar mal a vosotros, cuando es la persona tacaña (o despistada) la que está siendo poco considerada.


Otra opción, aunque personalmente no me gusta demasiado, es utilizar técnicas indirectas para reclamar el detalle de bodas. Podéis hablar de los regalos tan útiles y bonitos que os han hecho la próxima vez que veáis a esos invitados después de la boda; incluso enseñárselos si van a vuestra casa. También podéis utilizar a amigos y familiares que tengan contacto con ellos para que hagan de intermediarios. Como ya he dicho antes, no me parece una buena idea, porque ese "ahí lo dejo" es algo infantil y pasivo-agresivo. Pero, eso, por si te interesa ahí lo dejo...


Regalos


Dadle tiempo a ese invitado rezagado, porque puede ser que no os haya hecho un regalo porque se ha despistado, porque ha encargado un detalle personalizado y especial y está esperando que se lo entreguen, o incluso porque su situación financiera no es muy boyante y está esperando a que mejore para haceros un buen regalo. Las normas de etiqueta dan un margen para entregar o enviar el obsequio, por lo que conviene tener paciencia. En cualquier caso, si pasado 1-2 meses no os ha llegado nada, es mejor que deis por perdido el regalo.


Cada vez es más frecuente enviar notas de agradecimiento a los invitados para agradecer la asistencia a la boda y los obsequios recibidos. Si hay algún asistente que no os ha regalado nada, limitaos al agradecimiento por acompañaros el día de la boda. Si se le ha olvidado tener un detalles con vosotros, será el mejor recordatorio. Y si no os va a regalar nada, será una forma no explícita de afearle su tacañería.


Nota de agradecimiento


Analizad qué invitados no os han regalado nada. Si son muchos, quizás tendríais que plantearos sin la boda ha sido excesivamente lujosa y muchos de ellos han preferido no dar nada que quedarse muy cortos respecto al precio del cubierto. O puede ser justo por lo contrario, porque la comida, la bebida y la música han sido muy deficientes y os están penalizando de algún modo. Incluso puede ocurrir que no os hayáis percatado de que muchos de los invitados de vuestra lista tenían una mala situación económica que no habéis tenido en cuenta. 


Otro punto a tener en cuenta es la cantidad y calidad de lo que se regala. Hay muchas parejas (e invitados) que creen que los asistentes a la boda deben al menos cubrir con su obsequio el precio del cubierto. Y eso es un error. Los que habéis elegido el lugar y el precio sois vosotros y no podéis obligar a ningún invitado a cubrirlo. Si os dan dinero o regalos por un valor mayor que el cubierto, perfecto, mejor para vosotros. Si os dan menos o incluso no os entregan nada como detalle de bodas, no podéis hacer nada al respecto.


Si habéis optado por una destination wedding, tenéis que tener cuenta que el desembolso de los invitados será elevado, puesto que tendrán que pagar su viaje y su manutención (menos la recepción de boda, claro), además de su vestuario y arreglo personal, que puede encarecerse si se viaja fuera de la ciudad de origen. Algunos asistentes pueden pensar que el gasto extra es vuestro obsequio.


Regalos


También deberíais estar preparados para que, aunque hayáis incluido el número de cuenta para que os ingresen dinero o esperéis que os entreguen el consabido sobre el día de la boda, haya invitados que prefieran regalaros otra cosa. Lo normal es respetar el deseo de los novios de que se les entregue dinero en lugar de otros obsequios, pero siempre habrá quien quiera regalaros una cafetera o, como fue mi caso... ¡una cámara de vídeo! ¡Si ni a mi ahora marido ni a mi nos gusta grabar nada en vídeo! Si ni siquiera nos hacemos selfies! Aunque tuve ganas de tirarle la cámara a la cabeza a los regaladores, sonreí de manera encantadora y les di las gracias. ¿Qué iba a hacer? Por cierto, la cámara está guardada en un armario y no se ha utilizado jamás. Esperaré a que pasen unos pocos años más y la pondré a la venta como objeto tecnológico vintage ;)


Sobres
Aunque prefiráis dinero, habrá invitados que no son partidarios de los sobres o los ingresos...


Espero que no os tengáis que enfrentar a este tipo de situaciones y que no tengáis que recurrir a estas ideas. Y si es así, pensad que el mejor regalo es el amor que os tenéis y lo que habéis disfrutado de vuestra boda.




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