¿Con Quién Llegar al Altar y que No Sea ni el Padrino ni la Madrina?

Si os pido que os imaginéis el camino hacia el altar de unos novios, lo habitual es pensar en una novia del brazo del padrino, siempre el padre de ella; y en el novio del brazo de la madrina, como norma la madre de él. Y es que durante mucho tiempo ésta ha sido la fórmula habitual para recorrer el pasillo nupcial.


Pero las cosas han ido evolucionando en el mundo de las bodas, y de qué manera. Los que invitan son los propios novios, no sus padres. Las parejas que se casan no siempre están compuestas por una mujer y un hombre. Las invitaciones ya no son blancas, con letra historiada y unas alianzas grabadas y de color dorado, incluso llegan a enviarse por WhatsApp o e-mail. Los vestidos de novia no tienen que ser blancos obligatoriamente, ni siquiera color crudo o champán. Hay novios que se casan sin chaqué, a veces lo hacen hasta en mangas de camisa. Las ceremonias no son todas iguales, hasta incluyen fórmulas y rituales diseñados por los novios...


Y también ha cambiado la forma en la que los novios llegan al altar, porque hay muchas parejas que prescinden de los tradicionales padrinos y buscan alternativas. Seguid leyendo y sabréis los motivos, las alternativas y también algunos consejos que os serán útiles si queréis atreveros con una forma diferente de caminar por el pasillo nupcial. 

Motivos por los que prescindir de los padrinos

 
✿ Si no os gustan las tradiciones ni los convencionalismos.


✿ En caso de que haya fallecido alguno de vuestros padres, o ambos.


✿ Si hay una mala relación con los padres o con los suegros.


✿ Si alguno de los padres se ha divorciado y se ha casado de nuevo, y el otro no.


✿ En caso de que tengáis hijos, en común o cada miembro de la pareja por separado.


¿Con quién caminar por el pasillo nupcial?


✿ En solitario. Es una elección poco frecuente y que es toda una declaración de intenciones, puesto que revindica la independencia de los dos miembros de la pareja y su derecho a no ir acompañados, a que nadie "les entregue" en el altar. 

Eso sí, es imprescindible que ambos seáis personas con mucha confianza y que estéis seguros de vuestra decisión de caminar solos por el pasillo nupcial, porque es una situación en la que es fácil sentirse vulnerable y con toneladas de miedo escénico. Lo ideal en este caso es caminar despacio, con la cabeza alta, luciéndose y mirando a ambos lados del pasillo con una sonrisa.


✿ Vosotros dos. Cada vez hay más parejas que no siguen las tradiciones y que no creen en las supersticiones relacionadas con las bodas, incluida la de no verse antes de la boda. Si es vuestro caso, ¿por qué no llegar juntos del brazo hasta el altar. En mi caso así lo hicimos y no me arrepiento en absoluto, y eso que hace 12 años era una elección de lo más arriesgado.  

✿ Con vuestros hijos. Si ya tenéis hijos, sobre todo si ya son mayores, caminar por el pasillo nupcial con ellos puede ser una bonita experiencia para todos. En caso de que tengáis varios hijos, os pueden acompañar a ambos en lugar de a uno solo. 


Si escogéis caminar ambos hacia el altar, podéis llevarles de la mano con vosotros. Si lo vais a hacer por separado, os puede acompañar un hijo (o varios si sois familia numerosa) a cada uno. Seguro que será una experiencia muy emocionante.


✿ Con la madre o el padre a los que no corresponde por etiqueta ser los padrinos. Lo tradicional es que el padre de la novia sea el padrino y la madre del novio la madrina, pero... ¿por qué no cambiar? Quizás os apetezca más que os acompañen las madres de ambos, o los padres, o que la novia vaya acompañada de su madre y el novio de su padres.


✿ Con el padrastro o la madrastra. Hay casos en los que si uno de los padres se ha vuelto a casar, tanto si se ha divorciado como si ha enviudado, y en los que vuestra relación con su nuevo cónyuge es magnífica, quizás mucho mejor que con el padre o la madre biológicos. Si esto ocurre, puede que sea una buena dejar atrás los convencionalismos y darle protagonismo a vuestro padrastro o madrastra. 


Y si la relación es buena con todos, con los padres y los nuevos cónyuges, nadie os impide caminar del brazo de ambos. ¿Quién ha dicho que una novia no puede llegar al altar del brazo de su padre y de su padrastro? ¿O del padre y la madrastra? ¿O quién va a impedir que el novio esté acompañado por su madre y su madrastra?

✿ Con los abuelos. Si os han criado vuestros abuelos o alguno de los padres han fallecido, puede que los mejores para acompañaros por el pasillo nupcial sean cualquiera de los abuelos o incluso ambos. Les hará muchísima ilusión, y a vosotros también. Otra opción es que os acompañen junto con vuestro padre o vuestra madre, cada uno de un brazo.


✿ Con un hermano o hermana. En muchos casos, el familiar más cercano, con el que se tiene una mejor relación es con alguno de los hermanos; así que sería un bonito gesto contar con ese hermano o hermana favorito y con el que se han compartido juegos, confidencias, risas y lágrimas. También es una buena idea en caso de que vuestros padres no puedan compartir ese día con vosotros. 


Un pero a esta elección es que haya varios hermanos, porque puede que alguno de ellos se sienta ninguneado, aunque sois vosotros los que debéis poner en la balanza si os compensa más seguir a vuestro corazón o lidiar con monumentales enfados familiares.


✿ Con otro familiar. Hay ocasiones en las que se tiene una relación muy cercana con una tía o un primo, casi la misma que se tiene con una madre o un hermano, porque no se tiene más familia o porque hay una amistad profunda y mucho cariño entre ambos. Si es así, puede que os apetezca que os acompañe el día de la boda.  

✿ Con un amigo o amiga. En caso de que tengáis amigos muy íntimos, de esos con los que se ha crecido, con los que se ha jugado, con los que se han compartido mil y una aventuras, quizás sea una buena elección que caminen a vuestro lado por el pasillo nupcial.


Y algunos consejos...


✿ Valorad si el hecho de saliros de la norma va a producir tensiones graves con los padres que tendrían que ser los padrinos o con el familiar o amigo que sería el previsible para conduciros al altar. Si os compensa y prevéis que vais a poder templar los ánimos, adelante. En caso contrario, os aconsejo que lo penséis detenidamente.

✿ No le comentéis a todo el mundo vuestra elección, puesto que habrá muchos que os intentarán convencer de que os acompañen el padrino y la madrina al uso... y que os dejéis de experimentos. Si no queréis que os calienten la cabeza, es mejor que se enteren de quién os acompañará al altar el mismo día de la boda, no antes.


✿ Comunicadle lo antes posible al padrino y a la madrina previsibles que no lo serán, para que no se hagan una idea equivocada de su participación en la boda. Explicándoles con tacto y cariño el motivo de vuestra elección, incluso recurriendo a una mentira piadosa si es necesario.


✿ Y comunicadle también a la persona elegida que queréis contar con él o ella para que os lleve del brazo por el pasillo nupcial.


✿ Para terminar, os hago una sugerencia: si queréis darle un toque diferente y desenfadado a vuestra llegada a la ceremonia, podéis hacerlo de la mano de vuestro acompañante, en lugar de ir de su brazo.


¿Quién irá a vuestro lado cuando vayáis hacia el altar?




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La primera vez que apareció el post ¿Con Quién Llegar al Altar y que No Sea ni el Padrino ni la Madrina? fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?



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