La organización de un boda es una tarea compleja, no os voy a engañar. Aunque es una etapa preciosa e inolvidable para cualquier pareja, también supone estrés y quebraderos de cabeza. Y quizás uno de los puntos más críticos es la de la preparación de la lista de asistentes. El hecho de decidir quién os acompañará y quién no es decisivo, porque esas personas son las que compartirán uno de los momentos más emotivos de vuestra vida en común y las que contribuirán a que la boda sea un éxito... o todo lo contrario.
Por eso en este post quiero hablaros de los errores más habituales a la hora de elaborar la lista de invitados y cómo evitarlos. ¿Nos ponemos manos a la obra?
Dejarla para el último momento
Preparar la relación de invitados suele ser una de las tareas que más quebraderos de cabeza supone para cualquier pareja de novios, pero posponerla no lo hace más fácil, sino que lo complica. El hecho de no tener claro cuántos y quiénes asistirán a la boda impedirá que podáis continuar con muchos de los preparativos que dependen de ello. Por otra parte, según vaya pasando el tiempo y no tengáis definido el listado, los nervios y los remordimientos por no haberlo hecho irán aumentando cada vez más.
Comenzar a elaborarla antes de definir el presupuesto para la boda
No nos vamos a engañar, hace ya mucho tiempo que no se gana dinero con una boda. Lo que los invitados regalan no cubren en absoluto lo que los novios van a gastar en ello. Aunque sí suelen cubrir el cubierto y algo más, hay muchos más detalles que suponen mucho dinero. Eso significa que primero debéis tener claro cuál es el presupuesto del que disponéis y el tipo de celebración que deseáis y ajustar el número de asistentes que os podéis permitir.
No tener en cuenta la capacidad del espacio en el que celebraréis la boda
El lugar de celebración tiene un peso específico en la lista de asistentes. Si es muy grande, no se pueden utilizar zonas pequeñas y delimitadas y los invitados van a ser pocos, se puede crear una sensación incómoda (casi triste) por la cantidad de espacio vacío. Y si es pequeño y los asistentes previstos son muchos, probablemente os obliguen a reducir el número al no poder superar un aforo por normativa, o que los invitados no dispongan de sitio suficiente.
Es fundamental que decidáis qué es más importante para vosotros, el lugar en el que tendrá lugar la boda o la cantidad de personas con las que queréis contar.
No comunicaros entre vosotros
Es fundamental que la relación de asistentes a la boda la confeccionéis entre ambos, procurando consensuar las decisiones. Podéis preparar una lista cada uno por separado, una común y luego combinarlas hasta encontrar la que sea perfecta para vosotros.
Hacer demasiado caso a los demás
Es muy frecuente que la familia sugiera (o imponga) invitados a los novios, aunque es un tremendo error, tanto por parte de la pareja al aceptarlo como por parte quien opina por presionarles. La boda es vuestra, por lo que sois vosotros los que debéis decidir. Además, cuando se aceptar una sugerencia, lo habitual es que le sigan muchas más, de forma que una relación inicial de 50 invitados puede convertirse en una de 120 antes de que os deis cuenta.
Preparar una lista inicial demasiado pequeña
Si el número de invitados con el que comencéis es muy reducida, incluso en bodas íntimas, os podéis encontrar con dificultades, porque es más sencillo quitar nombres que añadirlos.
En un primer momento puede que hayáis contado con personas que por un motivo u otro no puedan asistir, o que después de pensarlo bien prefiráis no contar con ellas. Os pongo un ejemplo: deseáis que el número de invitados esté entre los 25 y los 30, y confeccionáis un primer registro de 27. Una vez que tanteáis a los posibles asistentes para saber si podrían estar presentes en la boda y que revisáis los nombres, tacháis a 10. Os habréis quedado con 17 personas, entre las que puede que haya cancelaciones. Eso significaría que vais a tener que rebuscar entre vuestros contactos para completar vuestro listado, algo que no suele salir bien, porque si no os habéis acordado de ellos en un primer momento, es por un buen motivo.
Elaborar una que sea demasiado grande
Al contrario que en el caso anterior, un listado enorme os creará problemas, porque no sabréis a quién tachar para llegar al número de asistentes que os hayáis propuesto en un principio. Y si no sabéis eliminar a los necesarios para conseguir una lista razonable, os podéis encontrar con una boda multitudinaria sin apenas daros cuenta.
No tomar precauciones con una posible lista alternativa
Es muy habitual crear un listado alternativo para completar el número de invitados, en caso de que haya muchas cancelaciones. Aunque esto puede ser una buena idea si necesitáis llegar a un número mínimo, lo cierto es que esta práctica puede llevaros a contar con personas que quizás no os agraden demasiado o con las que no tenéis apenas contacto.
Invitar a demasiada gente
Una relación de asistentes demasiado larga implica un presupuesto también interminable, algo que deberíais tener en cuenta. Por otra parte, es muy difícil que varios cientos de invitados sean personas realmente cercanas a vosotros. Si unís ambas razones, os daréis cuenta de que esas personas de más (pero a las que probablemente no habéis ni siquiera invitado a tomar un café en vuestra casa, ni lo haréis después) os van a salir muy caras.
Invitar a muchas personas por compromiso
Antes de añadir nombres sin ton ni son, tened en cuenta que es un día muy especial para vosotros, que únicamente deberíais compartir con aquellos a los que apreciéis y que os aporten cariño y alegría... y que al fin y al cabo os costarán dinero.
Invitar a más invitados de los que deseáis para llegar a un número mínimo
Hay algunos proveedores de catering que imponen un mínimo de invitados para poder celebrar la boda con ellos, o en caso de no llegar a él, cobran igualmente los cubiertos hasta cubrir ese número, asistan o no. Eso significa que algunas parejas añaden personas a su registro de invitados con los que probablemente no contarían en otras circunstancias. Y es un error, porque, como ya os he comentado antes, el día de la boda únicamente os deberíais rodear de personas a las que apreciéis y con las que os apetezca mucho compartir un momento tan especial.
Espero que este post os facilite la tarea de confeccionar la lista de invitados y que esta sea todo un éxito.
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La primera vez que apareció el post Errores Habituales al Elaborar la Lista de Invitados fue en el blog de ¿Quién Dijo Boda?
Errores habituales al elaborar la lista de invitados by ¿Quién dijo boda? - Arancha Moreno is licensed under CC BY-NC-ND 4.0
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